La mejor reunión en pista española

Madrid celebra hoy la mejor reunión atlética jamás disputada en España. El empuje del viento generado por la candidatura olímpica de Madrid 2012 lo ha permitido. En su momento hubo dinero y ganas de pedir la gran cita y se consiguió. Por cantidad y calidad en número de atletas, que suman más de 200 medallas conseguidas en las competiciones más importantes, Juegos Olímpicos, Campeonatos del Mundo o de Europa, no queda duda sobre su entidad. Sólo faltaría para completarlo la gran estrella, el gran nombre. Pero eso ya sería demasiado, en la línea de unos Mundiales, como los de Sevilla, en 1999, y mucho más difícil de conseguir aún en un año olímpico, donde todo se centra en los Juegos de Atenas, para los que falta ya apenas un mes -la apertura es el día 13 de agosto, aunque el atletismo no comienza hasta el 18-.

Muchas figuras han planificado su temporada con citas especiales, posiblemente de menos fuste, pero apropiadas a sus tiempos de preparación, y otros, como gran parte de los estadounidenses, aún disputan sus pruebas de selección para los Juegos. Aunque, buena prueba del nivel, sí estarán en Madrid algunos que nada más terminar en Sacramento ya han cruzado el Atlántico y su país, desde California.

El Super Grand Prix pertenece a la segunda categoría de reuniones del circuito atlético, sólo por detrás de las que integran la Liga de Oro. De ahí su importancia y que bastantes atletas tomen la cita de Madrid como una última oportunidad para ponerse a punto de cara a Atenas. A su vez, muchos otros estarán presentes para poder lograr en unos niveles elevados de competencia las marcas mínimas que aún les faltan para estar en los Juegos.

No será el caso de Manolo Martínez, que alcanzó ya la clasificación en la reunión de Salamanca esta misma semana con un último lanzamiento del peso a 21,06 metros. Una de las pocas esperanzas españolas de medalla olímpica protagonizará un duelo con los estadounidenses Adam Nelson, que logró plaza en los trials, y Christian Cantwell, gran decepción, pues pese a contar con la mejor marca del año, 22,54, se quedó fuera de los Juegos, con un cuarto puesto, tras criticar a los acusados de dopaje. Nelson alabó ayer mismo en Madrid el nuevo sistema de lucha antidopaje entablado en su país.

Por nivel, tal vez el lanzamiento de disco sea hoy la prueba de mayor nivel. Están casi todos los que son en la élite, empezando por el sempiterno lituano Virgilius Alekna, campeón olímpico y mundial, que ha conseguido instalarse en lo más alto de la élite sin dejar títulos grandes a alemanes, rusos y húngaros. Lo bueno para España es que en la lucha por los podios se ha metido Mario Pestano, en los aledaños ya de los 70 metros, distancia que da incluso oros casi seguros.

Otra gran prueba a seguir será el salto de longitud, encabezado por el estadounidense Dwight Phillips, número uno mundial con 8,44 metros y que también viene de ganar sus trials. Será la ocasión para probar sus fuerzas contra el gran rival de los dos españoles, Yago Lamela y el nacionalizado de origen cubano hace sólo unos días, Joan Lino Martínez. Su compatriota Iván Pedroso, en horas bajas desde hace mucho tiempo, tendrá que demostrar si vuelve a ser el que era para tener alguna opción en Atenas.

En las carreras existirá el interés por ver en 800 metros al verdugo este año del marroquí Hicham el Guerruj en 1.500 metros, su ex compatriota Rachid Ramzi, nacionalizado a golpe de petrodólares en Bahrein. Antonio Reina así tendrá una buena piedra de toque. Algo parecido le ocurrirá en 1.500 a Álvaro Fernández frente al todavía campeón olímpico keniano Noah Ngeny, el primero en dar el disgusto a El Guerruj, el portugués de tremendo final, Rui Silva, o el marroquí Adil Kauch, todos sobre los 3m 32s.

La Peineta podría hasta vivir algún ataque a récords del mundo, cuya protagonista debería ser, más que nadie, la rusa Svetlana Feofanova, que batió de nuevo la plusmarca el día 4, con 4,88 metros. La pértiga femenina no para. Sin embargo, la baja de María Mutola en 800 metros -como la del invicto dominicano Félix Sánchez en 400 vallas- es un índice de que el nivel en las pruebas femeninas será menor. Aun así habrá estrellas como la surafricana Hestrie Cloethe en altura, o la jovencísima velocista búlgara Ivet Lalova, en 200 metros. No hay programados 100 en la reunión, pero ella se ha descolgado este año con unos espléndidos 10,77s en el hectómetro.