126 detenidos en 31 provincias por vender anabolizantes para deportistas por Internet

Nuevo golpe a las redes ilegales de venta de sustancias dopantes para deportistas y culturistas. Agentes de la Comisaría General de Policía Judicial han detenido en los últimos días a 126 personas en 31 provincias acusadas de traficar con productos anabolizantes y esteroides que vendían a través de Internet y de teléfonos móviles. En la ciudad de Málaga estaba el mayor centro distribuidor de esta red, según fuentes de la investigación. La operación, que ayer por la tarde continuaba abierta, es la continuación de una anterior efectuada a finales de junio en la que hubo 21 arrestados.

Las detenciones que se han producido en los últimos días son continuación de la llamada Operación Gamma. En aquella ocasión fueron detenidos los dirigentes de la banda, considerados los "escalones superiores" en términos policiales, con lo que quedaban pendientes los distribuidores a menor escala, según explicaron fuentes policiales. Las pesquisas comenzaron al comprobarse que una persona había invadido muchas páginas de Internet ofertando este tipo de sustancias y se centraron en un grupo de españoles dirigidos por el estudiante de Medicina Francisco Javier R. V., que estableció contactos con Argentina, Estados Unidos, Italia, Chile, México y Tailandia.

La forma de proceder de los vendedores era siempre la misma. Captaban a sus clientes a través de gimnasios o de centros de entrenamiento. Muchas veces eran los propios monitores los que ofrecían estas sustancias dopantes para potenciar el desarrollo muscular y el rendimiento físico. En todos los casos, las vendían sin prescripción facultativa. Los clientes buscaban en todos los casos incrementar su rendimiento deportivo con sustancias energéticas para disminuir la fatiga durante la práctica del ejercicio. Culturistas y deportistas de competición de baja escala eran los compradores potenciales.

Los monitores de los gimnasios facilitaban a los potenciales clientes direcciones de correo electrónico o de páginas web en las que podían adquirir los productos. Los pagos se realizaban mediante tarjetas de crédito o transferencias a diferentes cuentas siempre con nombres de terceras personas. En caso de que la cantidad que debían abonar fuera muy alta, el vendedor y el interesado en las sustancias dopantes cerraban la operación por teléfono móvil.

Mensajería privada

El envío de los botes con las pastillas siempre se hacía por servicios de mensajería privados. De esta misma forma la organización conseguía la sustancia dopante que muchas veces adquiría en el extranjero. También han sido decomisadas pastillas de algunos laboratorios españoles, cuya procedencia está investigando la policía para saber cómo han sido adquiridas.

La red vendía todo tipo de sustancias, pero en especial distribuía gammahidroxibutirato (GHB) y lo distribuían y vendían al por menor, con las instrucciones y el material necesario para elaborar éxtasis líquido. También vendían efedrina, anabolizantes, esteroides, clembuterol, hormonas y otros materiales incautados por la policía que están pendientes de ser analizados.

Los flecos de la primera investigación han surgido gracias al análisis de toda la documentación, que fue estudiada por la Brigada de Investigación Tecnológica, y de los efectos intervenidos en los registros de junio.

Todas las pistas dirigían hacia un distribuidor de Málaga. En esta ciudad fueron registrados bajo la dirección del juzgado de instrucción número 6 de la capital malagueña cuatro gimnasios, una tienda de dietética y cinco domicilios, donde fueron hallada gran cantidad de anabolizantes, esteroides y otras sustancias dopantes. "Los compradores y los vendedores no se conocían físicamente. Todo lo hacían por Internet y, cuando el negocio era muy alto, lo cerraban mediante llamadas por teléfonos móviles", señalaron fuentes policiales.

El precio de los productos dependía de las cantidades que fueran adquiridas. Por ejemplo, un bote de 100 pastillas de Dianabol (un potente anabolizante) costaba unos 20 euros. Un frasco de Primobolán (esteroide anabólico que produce proteínas y aumenta la masa muscular) con 50 cápsulas suponía un desembolso de 34 euros, según un listado intervenido por la Brigada de Investigación Tecnológica. Otros medicamentos decomisados son Epoc, Eprex, Anabol, Winstrol, Sustenon, Testosviron, Durabolin y Oxandrolona. Los policías también se han incautado de 8.400 euros en efectivo.

Otro punto donde también fue decomisado un importante número de medicamentos fue en Galicia, donde había dos importantes distribuidores. La operación ha sido desarrollada de manera conjunta en Madrid, Cataluña, Comunidad Valenciana, Andalucía, Murcia, Galicia, Cantabria, Asturias, Aragón, Castilla-León y Extremadura.

Sólo en Barcelona habían sido detenidas 22 personas y la policía había efectuado dos registros. En Palma de Mallorca fueron arrestadas otras 18 personas. La policía ha registrado en total 100 gimnasios, además de tiendas de dietética. Los detenidos serán acusados de un delito contra la salud pública, además de venta ilícita de medicamentos por Internet.