Vallejo alienta a las fusiones empresariales para mejorar competitividad y fomentar la innovación

Las empresas andaluzas gozan en términos generales de un buen estado de salud económico y financiero, crecen en rentabilidad por encima de la media nacional, y se reproducen también a un ritmo más elevado -el censo de sociedades aumentó en 2003 un 4,7%-, pero arrastran déficits estructurales que comprometen sus condiciones de competitividad. Según el consejero de Innovación, Ciencia y Empresa, Francisco Vallejo, su principal obstáculo es la dimensión, por lo que anunció ayer un programa público para fomentar las fusiones y uniones empresariales.

En la presentación del informe que anualmente realiza el Instituto de Análisis Económico y Empresarial de Andalucía, entidad promovida por Unicaja, Vallejo dijo ante unos 200 empresarios que ya no basta con la búsqueda de cauces de cooperación entre sociedades, sino que es preciso dar un paso más atrevido y ambicioso, y unificar "órganos de gestión y capacidades que den más músculo a las empresas para para que estén en mejores condiciones de competitividad". "El mayor obstáculo para ser competitivo es la dimensión, dijo".

El consejero anunció que su departamento pondrá en marcha un "ambicioso programa" para fomentar las fusiones, de las que dijo "deben ser además el detonante que propicie la investigación".

Las empresas andaluzas se caracterizan por su pequeña dimensión. El 57,2% de ellas no tienen un solo asalariado, y apenas el 5,4% de las mismas supera la decena de empleados. Una de las consecuencias de este dimensionamiento es la debilidad tecnológica y el escaso esfuerzo en investigación en innovación, que constata el análisis de la central de balances. Como término medio, las sociedades andaluzas destinan a este capítulo 78 euros, frente a los 171,9 de media de las empresas españolas.

Para Vallejo este capítulo es fundamental, hasta el punto de que entiende de que la capacidad de competir ya no depende de la reducción de costes, sino de la innovación. El consejero invitó a los empresarios a destinar más fondos a la investigación, y señaló que el diferencial con la media española en inversión en investigación es más acuciado en el sector privado que en el público. En Andalucía representa el 0,62% del PIB, y en España el 1,10%, pero si se descompone este indicador, se comprueba que en la parte de aportación pública apenas hay diferencia, 0,45% por 0,40%, cuando en el sector privado es de 0,22% frente a 0,65% de la media de las empresas españolas.

Según la Central de Balances de Andalucía, en 2003 se crearon en la comunidad 18.704 empresas, un 4,7% más que en 2002 y la rentabilidad económica aumentó un 5,2%, por encima en ambos casos de la media nacional.

El presidente de Unicaja, Braulio Medel, resaltó la mejora de la solvencia, eficiencia y estado financiero de las empresas andaluzas, algo en lo que dijo han tenido un papel esencial las entidades financieras.