"Los aerosoles serán muy importantes en el cambio climático en los próximos 50 años"

Aunque el incremento de la concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera sea la causa esencial del calentamiento global, no es el único factor que interviene en el cambio climático. Las partículas en suspensión en el aire, los llamados aerosoles, interactúan con las nubes y producen efectos complejos que los científicos empiezan a desvelar. Los satélites son una herramienta muy útil para observarlos y Yoram J. Kaufman es un especialista de la NASA con mucha experiencia en estas investigaciones. Ha dirigido, por ejemplo, el satélite Terra estadounidense con el que se han estudiado los aerosoles y sus efectos y ahora está preparando nuevos equipos en órbita más avanzados. Recientemente ha estado en España para dar una conferencia en la Universidad de Alcalá de Henares (Madrid) y abordar la posible colaboración científica con el equipo de Emilio Chuvieco, de dicha universidad.

"Los gases de efecto invernadero son como una manta para la Tierra"

"En España las lluvias pueden reducirse debido a la menor evaporación"

Pregunta. ¿Qué aportan los satélites al estudio del clima?

Respuesta. El cambio climático se produce debido a las emisiones de la actividad humana a la atmósfera, gases como el dióxido de carbono, el metano.... El CO2 permanece en la atmósfera mucho tiempo, decenas de años, y las emisiones que se producen en un lugar afectan a todo el mundo porque se distribuyen casi uniformemente. Por ello los satélites tienen un gran impacto en su medición global.

P. Sin embargo, el problema con los aerosoles es distinto.

R. Los aerosoles tienen una vida de una semana en la atmósfera. Hay que tener en cuenta que la palabra aerosoles incluye muchos compuestos químicos diferentes, cada uno con un efecto distinto en el clima.

P. ¿Qué emite aerosoles?

R. Los coches, la la industria, los incendios, los fuegos... muchas cosas emiten aerosoles o precursores de aerosoles. Por ejemplo, las centrales eléctricas no los emiten directamente pero sí dióxido de azufre, que después en la atmósfera se convierte en un aerosol. Los incendios de bosques en los trópicos generan una enorme cantidad de aerosoles. También hay aerosoles naturales como el polvo de los desiertos. Son muchas especies químicas con propiedades químicas y ópticas distintas que afectan de modo diferente a la radiación solar y a las nubes. No se puede resolver el problema de los aerosoles sin satélites, porque es muy variable de un lugar a otro y de un día a otro.

P. ¿Qué miden esos satélites?

R. El primer instrumento en órbita hecho específicamente para detección de aerosoles era francés, del CNRS, y voló en 1996 en un satélite japonés. Se usaban sensores en el espacio para esto antes, pero eran equipos creados para otros propósitos. En la NASA diseñamos instrumentos específicos que empezaron a volar en 1999, como el satélite Terra. Tenía dos instrumentos para medir aerosoles. Yo trabajé básicamente con el instrumento Modis que logró excelentes datos de nubes y aerosoles, y hoy en día las mayores incertidumbres en cambio climático están en su interacción.

P. ¿Por qué?

R. Porque no se desarrollan nubes normales, que provocan precipitaciones. Las nubes que se forman con aerosoles muy pesados tienden a no precipitar en forma de lluvia, o no lo hacen fácilmente, y duran mucho más tiempo, con lo cual esas capas nubosas reflejan cantidades tremendas de luz solar al espacio. Es un proceso complejo.

P. Los modelos climáticos globales que empezaron a contar con el efecto de los aerosoles hace unos años indicaban que éstos inducían un enfriamiento temporal y localizado.

R. Sí, al reflejar más la luz del Sol. Es parte del efecto. Pero también tienen un efecto de calentamiento. El enfriamiento, si es muy fuerte, puede compensar en parte el calentamiento global provocado por los gases de efecto invernadero, pero como los aerosoles tienen una vida corta en la atmósfera, no pueden compensarlo eternamente. Y puede que la sensibilidad de la Tierra a los gases de efecto invernadero sea mucho más fuerte debido a los aerosoles.

Si me pregunta si habrá cambio climático a 200 años vista debido al CO2 o a los aerosoles, diré que sin duda debido al CO

2 , pero en los próximos 50 años... entonces los aerosoles son muy importantes.

P. ¿Puede poner un ejemplo?

R. En algunas regiones del planeta los aerosoles reducen temporalmente el calentamiento global, pero el efecto es más complejo y tiene impactos regionales diferenciados. Por ejemplo, se ha publicado en la revista Science un trabajo que indica que debido a los aerosoles habrá menos irradiación solar en la región del Mediterráneo y menos evaporación, de manera que las precipitaciones caerán hasta un 20% en algunas zonas. En España las lluvias pueden reducirse debido a la menor evaporación provocada por la contaminación de aerosoles procedente del norte de Europa. La influencia de los aerosoles en el ciclo hidrológico es muy importante.

P. El Protocolo de Kioto regula las emisiones de gases de efecto invernadero, pero no regula los aerosoles, ¿debería hacerlo?

R. Sin duda. Hay quien dice que es mejor concentrarse en un tipo de emisiones, el CO2,, que es lo más importante, y lograr que se cumpla ese acuerdo antes de dar otro paso. Pero desde el punto de vista científico, se tiene una perspectiva más clara del cambio climático si implicas no sólo el CO 2 y los gases industriales, sino también los aerosoles.

P. ¿A qué se refiere?

R. En varios países, por ejemplo, se subvenciona el diesel porque un vehículo recorre muchos más kilómetros que uno de gasolina con la misma cantidad de combustible y hay menos emisiones. Pero como el diesel es un hidrocarburo más pesado, el vehículo emite más aerosoles. Según un estudio, en los próximos 60 a cien años el efecto del ahorro en CO2 por usar diesel será menor que el calentamiento provocado por esos aerosoles. Reducir la contaminación siempre es positivo, pero el paso de un combustible a otro hay que hacerlo con cuidado porque los efectos son complejos.

P. ¿Qué satélites le gustaría tener para observaciones climáticas?

R. Satélites para medir mejor los aerosoles. Hemos hecho una propuesta para preparar un satélite más especializado que los actuales, en concreto quisiéramos medir los aerosoles utilizando no sólo canales espectrales sino también polarización, que fueran multidireccionales y multiespetrales lateralmente. Así podríamos observar las nubes y estudiar su desarrollo en altura y ver cómo crecen y cómo cambian las gotas en función de la altura.

P. Se ha argumentado en contra de tomar medidas sobre control de emisiones porque hay incertidumbres en la investigación del cambio climático. ¿No están seguros los científicos acerca del calentamiento global?

R. Las incertidumbres significan que queda mucho trabajo por hacer, pero estamos seguros de muchas cosas: las emisiones de gases de efecto invernadero actúan como una manta, y si te pones una manta extra en la cama, ¿estarás más caliente o no? Esto está pasando en la Tierra. Los aerosoles compensan en parte ese efecto en algunos lugares, pero muestran que el cambio climático es mucho más complicado. Vivimos con un margen de incertidumbres; en investigación del clima las tenemos pero eso no justifica... por ejemplo que EE UU rechace el Protocolo de Kioto, mientras que regula otras cosas que tienen mucha más incertidumbre: si uno se bebe una botella de vino y conduce un coche, no es seguro, al cien por cien, que vaya a provocar un accidente de tráfico y pese a ello está prohibido. Nuestra comprensión del cambio climático es suficientemente buena como para saber que es un grave problema.

P. Se está ya preparando el cuarto informe de evaluación del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático, de Naciones Unidas, ¿qué aportará?

R. Se centrará en la capa superior de la atmósfera, por una parte, y en la superficie por otra, en el efecto del cambio climático en los ciclos hidrológicos. Hay muchas investigaciones nuevas sobre estos aspectos.