El PP busca portavoz económico
La falta de un peso pesado en temas económicos, que pueda polemizar y actuar como interlocutor del vicepresidente Pedro Solbes en el Congreso de los Diputados, se puede convertir en uno de los problemas más serios del Partido Popular a la hora de desarrollar su política de oposición.
Tradicionalmente, el PP, en la oposición o en el Gobierno, siempre pudo contar con un gran peso pesado, Rodrigo Rato, para encabezar el equipo económico. En la actualidad, no sólo no puede recurrir a su antiguo vicepresidente, que ha optado por una brillante carrera internacional, sino que tampoco puede confiar en su último ministro de Hacienda: Cristóbal Montoro prefirió reclamar una plaza de eurodiputado en las últimas elecciones europeas antes que protagonizar la dura tarea de criticar y controlar la labor del vicepresidente económico socialista.El resultado es que Mariano Rajoy tiene un agujero importante en su equipo parlamentario. De momento, el grupo parece recurrir a Miguel Ángel Arias Cañete, el experimentado ex ministro de Agricultura, como primera espada, y al incombustible y omnipresente diputado Vicente Martínez Pujalte, como secundario. Sin embargo, algunos dirigentes populares creen que Rajoy debería reforzar ese equipo y buscar un auténtico peso pesado que represente en el partido lo que supuso Rato en su día.
"Lo más importante no va a pasar en octubre, sino en noviembre. A nosotros, en el PP, nos interesa mucho que Bush vuelva a ganar", admite un veterano dirigente
"No tenemos mucha prisa, pero está claro que no podemos llegar a 2008 con el equipo económico actual y con Solbes al otro lado. Hay que tomarse ese problema en serio e ir buscando el relevo, como mucho, en un año", explica un diputado popular. En ese plazo, estima, la economía puede volver a convertirse en un tema electoral: "Ése fue uno de nuestros mayores logros y esperamos que la opinión pública sea muy exigente con los socialistas en ese sentido. Así que necesitamos a alguien que se dedique en exclusiva a ese trabajo".
El grupo parlamentario popular y los dirigentes regionales del PP están satisfechos con la labor parlamentaria de Mariano Rajoy. "Su habilidad parlamentaria ha sido muy importante a la hora de consolidar su liderazgo en el partido. Si no llega a hacerlo bien en el Congreso, su papel hubiera quedado muy comprometido", asegura un ex dirigente popular.
"Pero una cosa es que nadie compita por el puesto de Rajoy en el próximo Congreso, y otra, que no existan dudas sobre su equipo", precisa el mismo diputado. La única persona que podría competir sería Alberto Ruiz-Gallardón, pero el alcalde de Madrid sabe que éste no es el momento de luchar con Rajoy, sino de unirse a él y de convertirse en uno de sus allegados, asegura.
Para este diputado, la duda más importante, cara a octubre, será el papel de Ángel Acebes, muy defendido por Esperanza Aguirre y por otros dirigentes que llegaron incluso a apostar por él durante la carrera por la sucesión de Aznar. Se quiera o no, para cuando se celebre el congreso popular ya se conocerán las conclusiones de la comisión de investigación del 11-M, y la posición en la que ha quedado el actual secretario adjunto y antiguo ministro del Interior. Es posible, analiza otro diputado popular, que no sea aconsejable elevar a Acebes a la posición de vicesecretario general (sustituyendo a Rato, por ejemplo). Tampoco le parecería lógico que Federico Trillo siguiera en el puesto como presidente del comité de derechos y garantías.
Carlos Aragonés
Otra figura que despierta curiosidad es Carlos Aragonés, director del Gabinete de la Presidencia del Gobierno desde mayo de 1996 hasta abril de 2004, con Aznar, y actual adjunto al secretario general. "Aragonés, con su ascético y oscuro aspecto de jesuita del XVII, está demostrando ahora en el Congreso unas inesperadas dotes de agitador que han dejado muy desconcertados a algunos de sus colegas", admite con ironía un diputado popular que confiesa no sentirse "un gran admirador" del antiguo "fontanero" de Aznar. Aragonés, cuyos gritos y provocativos gestos en su escaño del Congreso han llamado la atención, ya no está tan próximo a Aznar, sino que intenta llevarse bien con Rajoy y aportarle su experiencia, sin que esté claro qué piensa al respecto el nuevo dirigente del PP.
"Todo eso son menudencias y el congreso se desarrollará sin problemas", mantiene un miembro de la actual ejecutiva. "Para nosotros", añade con algo de sorna, "lo más importante no va a pasar en octubre, sino en noviembre. En noviembre son las elecciones presidenciales norteamericanas, y a nosotros, en el PP, nos interesa mucho, pero que mucho, que George Bush vuelva a ganar". "Ahora no podemos ni abrir la boca cuando se habla de Irak, pero otro gallo nos cantará si Bush sigue en el poder en Washington", promete.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.