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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Las eléctricas y el calor

El jueves aparecía por televisión (y ayer lo recordaba el editorial de EL PAÍS) el presidente de Endesa, Manuel Pizarro, haciendo una llamada a revisar nuestros hábitos en aras a moderar el consumo de electricidad, insostenible, a lo que parece. Hoy, paradojas te da la vida, me llega la factura de Endesa -¡exacto, la misma Endesa!- con una vistosa publicidad embebida y un folleto adjunto a todo color encabezados por el eslogan "¿Otro verano enganchado al ventilador?", donde me ofrecen financiación para la instalación de aire acondicionado.

Ciertamente, no tener aparatos de aire acondicionado me produce incomodidades, pero la llamada de don Manuel me ha llegado al corazón; voy a renunciar a la financiación que me ofrece, y a seguir soportando el calor, para que estos preciosos caudales financieros puedan revertir en la mejora de líneas y transformadores.- Antoni Mont. Barcelona.

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Es completamente absurdo, inexplicable, inaudito, que esta semana de ola de calor (muchas horas de sol sin brisas frescas) haya producido cortes de electricidad en Sevilla, la gran ciudad más calurosa de España y de Europa.

El año pasado sufrimos una ola de calor en julio y agosto. Y los europeos debían de creer que eso era esporádico en vez del futuro previsible. Y en España el Gobierno del PP ni reconoció todas las muertes a consecuencia del calor ni empezó a corregir su mala política energética. Digo mala porque también hubo cortes de luz, o enorme demanda, y no se revisaron las instalaciones de todas las empresas eléctricas, y sobre todo no hubo un cambio en la filosofía de la producción y consumo de la electricidad en España.

Porque lo asombroso es tener esa hoguera inclemente gratis y no utilizarla para producir energía que sirva para contrarrestar su calor. Pues sabemos que usan más la energía solar en Alemania que aquí. Pero aquí, como es caro instalarla, pues es una rareza. No sé si hay intereses creados pues parece estarse invirtiendo más en energía eólica (que es menos atractiva visualmente y depende de los vientos aleatorios) que en la energía solar, que es fija cuando más se necesita, en verano, ya que la electricidad no se puede acumular. Así que lo que tenía que haber hecho el Gobierno de Aznar hace un año y lo que debería hacer el de Rodríguez Zapatero es fomentar que todos los tejados produzcan energía solar.

Se pueden subvencionar los aparatos, se puede pedir a arquitectos y centros de investigación más formas prácticas de tener placas solares en cada edificio (es increíble que no se hayan diseñado tejas-paneles o paneles-tejas que ya incluyan todos los elementos necesarios para aprovechar la energía solar) y se puede obligar a los constructores y urbanistas a poner paneles solares en todos los tejados, y se puede poner de moda que las viviendas deben tener elementos refrigeradores como los tienen de calefacción desde su construcción.- María Siguero. Colmenar Viejo, Madrid.

Estos días, al ver las noticias, es cuando se le queda a uno verdaderamente cara de tonto. Me refiero a los "acostumbrados" cortes de luz que padecemos cada vez que la lluvia, el viento, y sobre todo el calor, tienen la osadía de aparecer más de lo que fuera menester.

Se habla de récord en la demanda, de fallos en los sistemas por sobrecargas, de falta de previsión e inversión... etcétera. Yo, sin embargo, me detengo en otro aspecto para mí importante y que no se ha tratado lo suficiente: ¿no se aportó una cantidad importante de millones de euros cuando se liberalizó el sector bajo promesas esperanzadoras sobre las grandes ventajas que esta medida traería a nuestros bolsillos? Siendo así, hay algo que no encaja: si el sector está liberalizado, ¿por qué las distintas compañías eléctricas (Endesa, Iberdrola, Unión Fenosa e Hidrocantábrico) se reparten el país como si fuera una tarta en porciones?

En algunas zonas las compañías están desbordadas por la demanda; entonces, cuando se construye una vivienda, una urbanización o un negocio y se solicita el alta en la red... ¿la compañía le advierte del problema y le recomienda dirigirse a otra porque ella está saturada, como sería lo normal en un sector realmente liberalizado? Me temo que esto no ocurre así; se limitan a "enchufarte", más tarde, si surgen problemas de suministro... ¿qué? Usted pague la factura primero y después... Dios dirá; es realmente vergonzoso.

Pero no queda ahí la cosa, ahora tienen la cara de decir que, para invertir en infraestructuras, nos tendrán, "muy a su pesar", que subir el recibo de la luz. En 2003, según EL PAÍS, las compañías eléctricas tuvieron unos ingresos de 25.000 millones de euros, con un beneficio neto conjunto de 2.300 millones; sin embargo, se gastaron en la red de distribución tan sólo 1.400 millones. ¿Ustedes lo entienden? Está claro que prefieren invertir el dinero en otros "negocios" más productivos para ellos. Ahora, gracias al clamor popular, presionan al Gobierno para que les autorice a aumentar el recibo para no tener que asumir ellos los gastos de las actuaciones de mejora de la red. Es el cuento de siempre, en el que siempre pierde el mismo, el consumidor. ¡Ah!, y además, según la ministra Cristina Narbona, el aumento de la demanda se debe al mal acondicionamiento de los hogares. Si es que somos tontos, ¡mira que conformarnos con unos "pisuchos" de protección oficial, con lo ideal que sería vivir en grandes casas bien acondicionadas, y sobre todo con lo tiradas que están ahora las hipotecas! En fin, debe ser por eso, porque somos tontos, que al final como castigo tendremos que pagar nosotros.- Miguel Romano Romero. Puebla de la Calzada, Badajoz.

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