La estimulación acústica aumenta hasta el 80% el éxito terapéutico en trastornos del equilibrio

La Clínica Universitaria de Navarra (CUN) ha conseguido la eliminación de los síntomas de inestabilidad crónica de origen vestibular en el 80% de los pacientes tratados en el centro mediante la combinación de técnicas de retroalimentación acústica y visual.

La clínica navarra lleva un año experimentando un tratamiento de estimulación acústica mediante dos giroscopios de gran precisión ajustados a la cintura del paciente que miden, entre otras variables, la angulación del desplazamiento troncal y la velocidad del movimiento en los circuitos de prueba y emite sonidos a modo de guía que permiten al paciente mantener el equilibrio correcto.

El sistema fue diseñado en el Hospital Universitario de Basilea (Suiza), centro con el que ha colaborado la CUN pamplonesa a la hora de realizar el estudio de inestabilidad vestibular, en el que han participado además dos expertos médicos de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.

El 30% de los mayores de 60 años acude al médico con trastornos del equilibrio

El estudio, que se va a presentar próximamente en el Congreso Internacional de Otorrinolaringología de París, se ha centrado en 40 pacientes con inestabilidad crónica derivada del tratamiento de vértigo posicional, enfermedad de Meniére o de un problema vestibular de origen periférico. "Los problemas de inestabilidad suponen el 20% de la actividad de una consulta especializada", señala Nicolás Pérez, director del departamento de Otorrinolaringología de la clínica navarra y máximo responsable del programa.

Un paciente con daño en el sistema del equilibrio puede recuperarse si desaparece el déficit original, algo que ocurre muy pocas veces, o bien compensando ese problema. En estos casos el sistema nervioso central se reorganiza funcionalmente para que el paciente mantenga el equilibrio. La incapacidad para compensar este problema es la causa de la inestabilidad, que provoca una pérdida de la calidad de vida en las actividades personales, profesionales y sociales de los enfermos.

El protocolo de rehabilitación vestibular tradicional aplica ejercicios de visión y el uso de plataformas de estabilidad donde tanto el suelo como el entorno visual son inestables y obligan al paciente a mantener el equilibrio. La CUN ha añadido un apoyo instrumental basado en la estimulación acústica y, según señala Nicolás Pérez, los resultados de éxito se han incrementado del 65% al 80%.

Los ejercicios sobre pequeños circuitos de obstáculos que se van complicando paulatinamente se realizan durante una hora y media dos días a la semana, a lo largo de cinco semanas. El protocolo se completa en casa con ejercicios útiles para estabilizar la mirada. Para analizar más en profundidad las causas por las que el 20% de los pacientes no ha obtenido mejoras, la CUN ha iniciado nuevos proyectos en los que hay más de 100 pacientes incorporados.

Aunque no hay estudios globales sobre la afección de la inestabilidad crónica de origen vestibular, se trata de una afección muy frecuente ya que el 30% de las personas mayores de 60 años acude a consultas de atención primaria con trastornos del equilibrio. Hasta el momento el programa de seguimiento, iniciado a partir de los dos meses de finalizado el tratamiento, ha permitido comprobar que la evolución de los pacientes es satisfactoria, con alguna recaída temporal vinculada al padecimiento de algún trastorno de salud transitorio como gripes o catarros.