Repliegue

Las bolsas iniciaron ayer el retorno hacia posiciones menos comprometidas desde las que la espera de acontecimientos resulte más tranquila.

La ausencia de noticias de estos días hace crecer en importancia la decisión que pueda tomar la Reserva Federal estadounidense sobre los tipos de interés, por más que analistas e inversores consideren ya descontada una subida de un cuarto de punto.

Otro asunto que obliga a los inversores a incrementar las precauciones y que coincidirá con la reunión del comité de la Reserva Federal es la proximidad de la entrega del poder en Irak, algo que en los mercados se considera una fuente de incertidumbres por más que se quiera presentar como parte de un proceso normal.

La contratación en el Mercado Continuo descendió respecto del día anterior, pero sólo en cuanto a las operaciones institucionales se refiere. El negocio fue de 2.101,70 millones de euros, con poco más de 600 millones en grandes operaciones y 1.490,44 generados mediante compraventa abierta.

El Ibex 35 perdió el 0,90% y cae otra vez por debajo de los 8.100 puntos, confirmando ese constante movimiento de vaivén que poco a poco va formando un amplio movimiento lateral. El índice general de la Bolsa de Madrid descendió el 0,81% para cerrar en 847,55.

Uno de los aspectos más destacados de esta sesión fue el descenso de los valores bancarios, provocado por una recomendación negativa sobre el Banco Popular por un posible descenso de márgenes, pero que terminó afectando con más fuerza a SCH y BBVA. El resto fue una simple retirada, pero que se centró sobre todo en los valores del Ibex 35, índice que ya sólo gana el 4,13% en el año, frente al 4,90% que sube el índice madrileño, que cuenta con más presencia de valores medios y pequeños.

La mejora de las expectativas económicas en Alemania en este mes de junio pasó completamente inadvertida para los inversores y la Bolsa de Francfort terminó cayendo el 1,53%. París bajó el 1,07%, y la Bolsa de Londres, el 0,75%.