Rumania cierra las puertas a la adopción internacional

El Parlamento de Rumania aprobó ayer por amplia mayoría, las tres cuartas partes de la Cámara, un paquete legislativo de medidas de protección a la infancia que incluye un nuevo régimen jurídico para las adopciones. La nueva Ley de Adopciones explicita en su artículo 39 que "la adopción internacional de un niño con domicilio en Rumania puede ser recomendada únicamente en el caso de que el adoptante, o uno de los componentes del matrimonio de la familia adoptante en el extranjero, sea el abuelo o abuela del niño para el cual se ha abierto el proceso de adopción interna".

Este artículo impide la adopción internacional de los 2.500 niños que, según datos oficiales, son susceptibles de ser adoptados, a día de hoy, en Rumania.

El documento regula, a su vez, el proceso de adopción interna, que queda abierto a los ascendentes en cuarto grado de los niños declarados "adoptables". Así, en cualquier caso de adopción contemplado, los menores serán insertados preferentemente en las familias de sus tíos o primos. De esta forma, el Gobierno de Rumania pretende ofrecer alternativas, dentro del núcleo familiar, a las familias de acogida y asistentes maternales. La adopción internacional, y su amplio desarrollo legal, con 18 artículos, queda exclusivamente para el caso de los abuelos.

La diputada del PSD, partido en el Gobierno de Rumania, Gabriela Coman declaraba tras la votación que "el nuevo marco legislativo obedece a la exigencia europea en materia de protección al niño y supone la creación de un sistema integral de protección de los menores frente a cualquier tipo de abuso, trastorno o violencia".

Adoptantes españoles

La nueva Ley, que entrará en vigor en enero de 2005, supone un auténtico varapalo para las familias adoptantes del extranjero que mantienen expedientes de adopción abiertos en Rumania. Fuentes diplomáticas aseguran que, en este momento, el número de expedientes españoles de adopción pendientes de resolución asciende a 714, aunque la coordinadora de padres afectados eleva la cifra a 750.

La adopción internacional en Rumania se encuentra en periodo de moratoria desde octubre de 2001, cuando, a raíz del escándalo internacional por las acusaciones de compraventa de menores en este país, el Gobierno rumano optó por interrumpir el proceso para legislar al respecto.

A pesar de las doce moratorias consecutivas habidas hasta hoy, 224 niños rumanos han sido adoptados por familias españolas en los últimos tres años por "circunstancias excepcionales". De los 714 casos pendientes, 330 atienden a este tipo de circunstancias, que incluyen el reagrupamiento de hermanos, la enfermedad o la llegada al límite de edad para ser adoptados. El resto son casos que quedaron en suspenso tras la entrada en vigor de la primera moratoria.