El ex edil de urbanismo de Nerja alertó de la "urbanización irregular" de otro concejal

José Luis Pezzi, concejal de Urbanismo de Nerja entre 1999 y 2003, alertó antes de abandonar su cargo sobre las obras que estaba impulsando el concejal de Medio Ambiente, José Miguel Jimena, en suelo no urbanizable. La Junta de Andalucía ha abierto expediente a la empresa de Jimena por infracción muy grave de la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía. El concejal se enfrenta a una multa de entre 1,3 y 2,7 millones de euros.

Pezzi asegura que señaló en una comisión de Urbanismo que Jimena estaba llevando a cabo una "urbanización ilegal a base de parcelar poco a poco suelo no urbano". El alcalde de Nerja, José Alberto Armijo, del PP, asegura que la advertencia de Pezzi se debía a que no repetía en las listas electorales.

El ex concejal reconoce que bajo su responsabilidad se aprobaron las primeras segregaciones en Pago de Río Seco, el terreno no urbanizable que, según la Junta de Andalucía, ha segregado y urbanizado Jimena. "Las primeras segregaciones no tenían pegas. La Junta los aprobó por lo mismo que yo, porque los expedientes venían uno a uno. Sin mirarlos en su conjunto, no eran ilegales", aseguró ayer Pezzi. Añadió que no le sorprende el expediente de la Junta, que además ha retirado las competencias sancionadoras al Ayuntamiento de Nerja en esa zona por permitir la construcción de "un núcleo de población en suelo común no urbanizable".

La Junta aprobó tres licencias de obra de Jimena en la zona. La Consejería de Obras Públicas alega que el Ayuntamiento de Nerja presentaba los expedientes poco a poco y con informes favorables, lo que retrasó la detección de la infracción. Pezzi, militante del PP, coincidió ayer en que la Junta no tiene posibilidad de detectar el alcance de la urbanización si los expedientes van por separado y que la labor de vigilancia corresponde al ayuntamiento.

Antes que Pezzi dejase el cargo, Jimena pidió una nueva parcelación en Pago de Río Seco, donde ha realizado una decena de divisiones. "Vi claro que la finalidad de las segregaciones era urbanística: ir dividiendo el terreno para construir en cada una de las parcelas y crear una pequeña urbanización irregular. Cuando en un terreno hay más de tres segregaciones tiene que haber una recalificación y una reparcelación, porque la zona se va a convertir en un núcleo de población que necesitará alcantarillado y servicios públicos". En esa comisión de urbanismo, la licencia de segregación quedó paralizada apetición de Pezzi.

El ex edil afirma que desde ese momento se convirtió "en alguien incómodo en la corporación" y que eso ayudó a que no repitiese en las listas. "Prefiero estar en mi casa sin problemas, que de concejal ante un juez", concluyó Pezzi. Armijo sostiene que el proceso fue el contrario: "Pezzi planteó dudas sobre las segregaciones cuando supo que no iba a repetir en las listas del PP".

Jimena sostiene que todas muchas de las segregaciones que ha pedido las realizó a través de su empresa para repartir una finca heredada entre la familia. Armijo defiende la legalidad "porque cuentan con informes favorables del arquitecto y del abogado municipal". "Estoy tranquilo. No lo estaría si hubiera actuado en contra del criterio de los técnicos", añadió.

Pezzi reconoce que los informes eran favorables, pero culpa a Armijo: "Los técnicos pueden decir que las segregaciones son legales, pero un político tiene que ver que la misma persona, y más si es un concejal, está parcelando un terreno rústico enorme y barato para construir una urbanización y venderla por una millonada".

Armijo afirma que no conoce Pago de Río Seco, un campo de aguacate sobre el monte y con vistas al mar en el que hay siete chalés. Las casas se ven desde la autovía que va hacia Málaga. Pezzi asegura que es ningún político puede ignorar ese crecimiento urbanístico. "Yo no podría decirle al juez que no he visto unas casas que se construyen frente a la autovía", concluye Pezzi.