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ESTA SEMANA
Columna
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Viejas formas para una nueva etapa

El presidente de El Monte de Sevilla y Huelva, José María Bueno Lidón, se dispone esta semana a culminar el proceso de renovación de su cúpula directiva. Con ello pretende rodearse de un nuevo equipo con el que afrontar el mandato de seis años que tiene por delante. Lo hace, además, con la intención de deshacerse de la herencia de su antecesor en el cargo, Isidoro Beneroso. Hasta ahora tenía un compromiso con una de las fuerzas imprescindibles para mantenerse en el puesto, Comisiones Obreras (CC OO), para que no se tocara a nadie. Pero tras la última renovación que se ha efectuado en los órganos de gobierno de la entidad, ya está liberado de ese condicionante y se dispone, por tanto, a realizar una mínima remodelación con la que dar cuenta de esta nueva etapa.

Sin embargo, todo hace pensar que los cambios a introducir se van a quedar cortos si es que se dan por buenos algunos de los nombramientos que ya se han apuntado. Permanecerán en sus puestos, e incluso se verán potenciados, algunos del anterior régimen, que están contaminados del peor de los estilos que aprendieron de su jefe Beneroso. Así se ha puesto en evidencia al comprobarse cómo han reaccionado estos esforzados directivos de pluma fácil tras dar a conocer El Correo de Andalucía la existencia de un demoledor informe del Banco de España que cuestiona varias operaciones inmobiliarias de El Monte.

Si Bueno y quienes le respaldan, PSOE y CC OO, piensan que personajes de esta índole deben seguir en primera fila de la entidad, adelante, pero luego que no se rasguen las vestiduras cuando el Banco de España les dé otro severo toque por sus, cuanto menos, arriesgadas prácticas inversoras y la prensa lo cuente, que es lo que realmente les duele.

Queda por saber qué maneras empleará la portavoz del PP en el Parlamento andaluz, la alcaldesa de Cádiz y senadora, Teófila Martínez, en la primera sesión de control al Gobierno que se inaugura este jueves. Dirigirá una pregunta al presidente de la Junta, Manuel Chaves, en relación a la paralización del Plan Hidrológico y sus consecuencias sobre Almería. Es todo un misterio cómo va a poder articular el nuevo estilo que quieren imprimir los populares para plasmar que son una verdadera alternativa teniendo como tienen a su principal líder, Javier Arenas, fuera del Parlamento. A lo mejor, para resolver esta carencia, se les ocurre ponerle despacho y secretaría en el Hospital de la Cinco Llagas, con tal de meter cabeza en la Cámara andaluza a pesar de su condición de diputado en el Congreso, en Madrid.

Dentro o fuera, el único que hasta ahora ha logrado que Arenas no meta baza en algo es el alcalde de El Ejido, el popular Juan Enciso. Su poder dentro del partido es tal que nadie ha osado en su organización censurarle lo más mínimo por su iniciativa de apoyo y petición de indulto a dos vecinos del pueblo condenados a varios años de cárcel por apalear y secuestrar a tres inmigrantes. Si de verdad quiere que los ciudadanos perciban al PP como una fuerza de centro, ya sabe por dónde empezar.

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