Don Felipe y Letizia visitan los escenarios de la boda para ensayar la ceremonia
La Reina, las infantas y los sobrinos de los contrayentes también estuvieron en la Almudena
Esta vez los dobles descansaron. Ayer fueron los novios quienes acudieron a la catedral de la Almudena para participar en los preparativos de su enlace. Eran poco más de las once de la mañana, la misma hora en la que mañana contraerán matrimonio, cuando don Felipe llegaba al Palacio Real acompañado de Letizia Ortiz. Cuando su presencia fue descubierta por la gente que se encontraba en la inmediaciones, comenzaron los aplausos. Más de un "viva los novios" se escuchó entre los congregados. Don Felipe, que vestía de sport, y Letizia saludaron muy sonrientes a todos, pero en seguida se cerraron las puertas para que los preparativos se mantuvieran en el más estricto de los secretos.
Pero se ha sabido que en el interior del templo, Letizia ensayó con sus damas cómo moverse con la cola de su traje de novia, diseñado por Manuel Pertegaz. El ensayo se prolongó durante tres horas. En este espacio de tiempo, el realizador de Televisión Española Javier Montemayor también realizó algunas pruebas de luz e imagen y conversó con la pareja para explicarles algunos detalles de la retransmisión que ha diseñado.
El templo se encuentra casi listo para la boda de mañana. Los bancos están perfectamente alineados y a cada lado del altar central se han situado sillas forradas de tela para las familias de los contrayentes y los representantes de las casas reales.
De las paredes de la catedral también cuelgan ya los valiosos tapices seleccionados por Patrimonio Nacional. Los novios también vieron la carpa instalada en el Patio del Príncipe del Palacio Real, donde se servirá el almuerzo, así como los salones preparados para el aperitivo.
Una alfombra roja cubre el Patio de la Armería, desde la puerta del Palacio Real a la de la catedral de la Almudena. Esta superficie se encuentra protegida por un plástico que sólo se quitará instantes antes de que se inicie la boda.
Ante la previsión meteorológica que indica que mañana el tiempo será lluvioso, la organización del enlace decidió ayer instalar una pasarela cubierta a la entrada de la puerta por la que accederán la mayoría de los 1.400 invitados.
Al ensayo general también asistieron los hijos de las infantas Elena y Cristina que, junto a la pequeña Carla, sobrina de Letizia Ortiz, formarán parte del cortejo que acompañará a los novios. Los pequeños portarán una gran guirnalda de flores.
Para presenciar en directo todos los preparativos del enlace, también acudieron hasta palacio las infantas Elena y Cristina, que lo hacían por primera vez. Y por tercer día consecutivo lo hizo la Reina, que ayer vestía pantalones vaqueros.
En secreto
Desde la catedral de la Almudena, los novios se marcharon hasta la Basílica de Atocha, donde Letizia Ortiz hará entrega de su ramo de novia a la Virgen. Allí también fue descubierta su presencia, y de nuevo los servicios de seguridad intentaron que los ensayos pudieran llevarse a cabo en secreto.
Don Felipe y Letizia, en su paseo por algunas calles de Madrid, pudieron ver en directo cómo la ciudad se engalana para la boda. A pocas horas de la ceremonia, las calles del itinerario ya están casi listas. El plata, el rosa y el amarillo, repetidos en parterres cuajados de flores, farolas, balcones, cubiertas y fachadas, son los colores que predominan en toda la ciudad.
Los operarios aseguran estar ya en la última fase de los preparativos. Ayer se colocaron centros de rosas y ramas de almendros en flor artificiales suspendidos de las farolas. Las torretas donde se han albergado las cámaras de televisión se han cubierto con lonas de color rosa y el emblema de la boda real. También un equipo de 400 voluntarios ha comenzado a repartir lonas y banderas por los edificios por los que discurrirá la comitiva nupcial.
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