El alcalde de Jaén excluye a la portavoz de su grupo del balance de mandato

El alcalde de Jaén, Miguel Sánchez de Alcázar (PP), hizo ayer balance anual del mandato con dos ediles de su confianza y excluyendo a la portavoz del grupo, Inmaculada Solar, y a cualquier otro representante del sector afín a la dirección provincial del PP. El primer edil dijo que la situación económica "no es catastrofista" y sólo vio "parálisis" en los proyectos de la Junta.

Sánchez de Alcázar calificó de "intenso, dinámico, satisfactorio y positivo" el primer año del presente mandato. El alcalde puso especial énfasis en las áreas que dirigen concejales de su confianza, especialmente Urbanismo, Presidencia y Cultura. Sin embargo, pasó casi de puntillas por las que están en manos de los afines a la dirección del PP. Este sector, personificado en la portavoz y secretaria provincial del partido usa el número de mayo de la gaceta municipal que edita el grupo popular para vender la gestión de las áreas que no controla el alcalde, como Hacienda, Universidad Popular, Mujer.

La única defensa que hizo Sánchez de Alcázar al sector crítico dentro de su equipo de gobierno fue para restar trascendencia a la imputación del presidente provincial del PP y concejal en el Ayuntamiento jiennense, José Enrique Fernández de Moya, que ha sido llamado a declarar por el juez por presunto delito electoral al colocar su partido banderolas en zonas no autorizadas por la Junta Electoral. "Es una minucia, no hay una razón objetiva de fondo", señaló el alcalde, para quien se trata de un tema donde los presidentes provinciales -él lo fue antes que Fernández de Moya- "ni se enteran ni tienen por qué enterarse".

Respecto a la grave situación económica, que ha sido censurada incluso por el Tribunal de Cuentas de Andalucía, el alcalde jiennense dijo que no es algo "catastrofista" y recordó que cuando gobernaba el PSOE -hace ya 12 años- "no se le pagaba a nadie y la carga financiera era el doble de la actual". En ese sentido, manifestó que Jaén tiene la presión fiscal "más baja de Andalucía", el endeudamiento "está dentro de los límites legales" y garantizó que el Ayuntamiento mantendrá el ritmo inversor de los últimos años.