El alza de tipos inquieta al inversor

En el mundo del dinero todo gira en torno a los tipos de interés. Después de más de dos años donde los bancos centrales han abaratado el precio del dinero para impulsar las economías, marcando niveles mínimos desde la década de los cuarenta, ahora toca subir.

Los responsables de la política monetaria estadounidense, Alan Greenspan, y europea, Jean-Claude Trichet, han insinuado que los tiempos de los tipos en mínimos han llegado a su fin, máxime cuando la economía estadounidense se recupera y, además, el precio del petróleo marca sus máximos desde 1990, en torno a los 37 dólares por barril de crudo brent.

Este alza de tipos que se producirá primero en Estados Unidos obliga al inversor a preparar su cartera. El más directo perjudicado es el mercado de renta fija, donde el precio de los bonos debe ajustarse a las nuevas rentabilidades. En EE UU, su bono a 10 años ha pasado en pocos días de rentar el 3,6% a alcanzar el pasado viernes el 4,7%. Las bolsas también se ven perjudicadas porque empeora su valoración y las empresas tendrán que soportar mayores costes financieros. Los analistas indican que los valores con mayor endeudamiento (eléctricas) y las constructoras serán los valores bursátiles más perjudicados por el cambio de tendencia. Por el contrario, las acciones bancarias resultarán beneficiadas.