_
_
_
_
AL VOLANTE | PRUEBA
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Carácter y solidez

La deportividad es uno de los valores en alza del nuevo Astra y se aprecia en el diseño exterior y en el interior, que mantiene una configuración clásica, pero con un estilo más moderno y alegre. Además incluye unos mandos muy precisos (intermitentes, limpiaparabrisas...) que se accionan con apenas rozarlos, aunque exigen acostumbrarse.

Un turbodiésel pequeño y mejorable

El motor 1.7 CDTi de 100 CV es el más potente en gasóleo hasta que llegue en septiembre el 1.9 de 150 CV. Es un propulsor de tacto suave y equilibrado que ofrece unas prestaciones aceptables para viajar e incluye la tecnología del raíl común de segunda generación.

Más información
Cambio estético y más deportividad

Sin embargo, acusa su limitada cilindrada frente a los motores 2 litros de sus competidores: es más sensible a la carga en carretera, exige reducir a cuarta en las subidas y le falta algo de brío al adelantar, en parte porque las marchas son más largas de lo ideal y no permiten sacarle el máximo partido. Pero sobre todo se echa en falta una más fuerza por debajo de 2.000 revoluciones y se nota en ciudad, porque obliga a utilizar el cambio más de lo deseable para que responda con nervio.

Los consumos tampoco son muy bajos: puede gastar menos de siete litros en conducción tranquila, pero sube a ocho en ciudad y llega a nueve a ritmos rápidos.

Boletín

Las mejores recomendaciones para viajar, cada semana en tu bandeja de entrada
RECÍBELAS

Estabilidad sobresaliente

El nuevo Astra tiene un comportamiento dinámico muy mejorado respecto al anterior y la diferencia se aprecia más en el acabado Cosmo, que lleva suspensiones más enérgicas y la altura al suelo rebajada en 15 milímetros. Además conviene añadir el control de estabilidad ESP (590 euros) y el paquete IDS Plus (680 euros), una suspensión con control electrónico que adapta los reglajes de los amortiguadores al instante según el estado de la carretera y el estilo de conducción.

La unidad de pruebas montaba las dos opciones, muy recomendables porque aportan una estabilidad y seguridad sobresalientes: el coche gira muy plano y sin balanceos laterales en las curvas, no transmite las irregularidades del piso y se agarra muy bien sin sacrificar el confort. Y si en algún momento se superan los límites, las ayudas electrónicas recuperan el equilibrio sin que el conductor apenas lo perciba. Además, esta opción incluye también una tecla Sport en la consola que realza la deportividad: endurece la amortiguación y hace más directa la respuesta del acelerador y la dirección para mover menos el volante en los giros y disfrutar su deportividad.

Los frenos y el ABS paran el peso en pocos metros sin perder el equilibrio aunque se pise a fondo el pedal en mitad de una curva. Así, el resultado final es una conducción fácil, agradable y eficaz en todos los trazados, ya sean lentos o rápidos. Y un tacto deportivo que refuerza su carácter y permite viajar con una sensación de solidez y aplomo que dan confianza.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_