Cambio estético y más deportividad
Revolución estética, calidad superior y un carácter más deportivo para disfrutar al volante. Y también los últimos avances electrónicos en ayudas a la conducción, la mayoría opcionales, y unos precios correctos para competir en buenas condiciones. Son los argumentos que sitúan al nuevo Opel Astra entre los mejores coches compactos del mercado.
Una línea con fuerza
El nuevo Opel es el gran rival del Golf en Europa, aunque hasta ahora no ha logrado acercarse a sus ventas. Sin embargo, la tercera generación llega con nuevas armas, y la primera es su imagen. Frente al continuismo estético del Volkswagen, este Astra supone un cambio radical que busca reforzar su personalidad con un estilo más deportivo. Así, estrena un frontal más agresivo, con unos faros rasgados multifocales de gran tamaño, un capó prominente y una rejilla dividida en dos por la matrícula que recuerda a los últimos Audi. Las tomas de aire del parachoques, los resaltes de las aletas delanteras, las formas abombadas de las traseras y las llantas definen una estética más deportiva y una personalidad marcada que le distingue de sus rivales. Y mantiene la cuidada aerodinámica de Opel (CX: 0.32).
Más espacio y calidad interior
El nuevo Astra comparte el chasis del anterior con muchos cambios y refuerzos, y ha crecido en todas las direcciones: ahora mide 4,25 metros de largo, 14 centímetros más, y es también otros 4,4 más ancho y 3,5 más alto. Este aumento le sitúa entre los coches más amplios de su tamaño, y se aprecia sobre todo en las plazas traseras, que cuentan con dos centímetros más de espacio para las piernas. En cambio, el maletero es similar.
Pero lo que más llama la atención es la calidad interior, que incluye detalles muy cuidados: asientos atractivos y envolventes, buenas tapicerías y paneles de las puertas... Destaca también la consola central, y aunque mantiene el estilo frío de la marca en otros elementos (frontal del salpicadero, zona del cambio...) la calidad general es notable, con buenos acabados y ajustes que crean un ambiente elegante y moderno.
En el aspecto práctico ofrece un acceso cómodo a las plazas traseras, pero se echan de menos más huecos: apenas cuenta con las bolsas de las puertas, dos repisas y un posavasos junto al freno de mano, un pequeño apoyabrazos hueco, bolsas en los respaldos y un estuche de gafas en el techo. Por lo demás, la insonorización es correcta y las suspensiones filtran bien los baches, y permite afrontar los viajes con comodidad y seguridad.
Opciones electrónicas
La carrocería cinco puertas es la única disponible en el Astra, y cuenta con seis motores: 1.4 (90 CV), 1.6 (105 CV), 1.8 (125 CV) y 2.0 Turbo (170 CV) en gasolina. Y hay dos 1.7 CDTi turbodiésel (80 y 100 CV). Se ofrecen en cuatro acabados: Essentia, Enjoy, Cosmo y Elegance, pero el primero incluye ya cuatro airbags, ABS, equipo de música, elevalunas eléctricos y cierre con mando. Además se pueden añadir opciones innovadoras que mejoran la seguridad: control de estabilidad ESP Plus, control electrónico de amortiguación, faros que giran con el volante...
Los precios son similares a los de sus rivales, y en septiembre llegará un 2.0 Turbo de 200 CV, un 1.9 turbodiésel de 150 CV y la versión Caravan o familiar. La gama se completará en primavera de 2005 con la versión tres puertas.
Conclusión
El Astra es un familiar moderno y con personalidad. Tiene una línea con carácter, un interior amplio rematado con buen gusto, una mecánica correcta y un comportamiento dinámico que combina deportividad y seguridad para disfrutar mientras se conduce. Y se vende a unos precios ajustados y competitivos para lo que ofrece.
VISTOSO Y DESAHOGADO
Las mejoras en la calidad general del Astra se aprecian a simple vista en el interior, con unos materiales y ajustes vistosos y muy superiores a los del modelo anterior. El salpicadero es algo simple y austero: apenas incluye un rebaje para la pantalla del navegador y un listón frontal de adorno. Pero la consola central tiene un diseño moderno y ergonómico que facilita el accionamiento de los mandos: climatización, equipo de música...
La habitabilidad es otro punto fuerte del Astra, que tiene unas plazas traseras desahogadas y con más espacio para las piernas que su antecesor. En cambio se echan en falta más huecos en la zona posterior para dejar los objetos personales en los viajes: las bolsas de las puertas son casi simbólicas y no hay ningún posavasos. Así, la dotación de espacios útiles es limitada y se concentra en la zona del freno de mano, con dos repisas, un apoyabrazos con cofre interior y un posavasos.
El Astra mantiene un maletero correcto (350 litros), que ahora presenta unas formas más aprovechables gracias al nuevo diseño de las suspensiones traseras. Y la zaga incluye una cintura de chapa alta, una luneta estrecha y unas aletas y parachoques musculosos que potencian la imagen sólida y robusta del conjunto.
COMPETITIVO Y BIEN EQUIPADO
El Astra 1.7 CDTi en acabado Cosmo es algo más caro que la mayoría de sus rivales, pero tiene un equipo de serie superior, con seis airbags y detalles como climatizador, reposacabezas delanteros activos, sensores de lluvia y faros, ordenador de viaje, radio CD con siete altavoces...
El nuevo Opel cuesta 20.130 euros, casi 3.000 más que el Mégane 1.5 dCi, aunque Renault incluye ya en el precio oficial el descuento promocional del mes. Además, el familiar francés viene con aire acondicionado en vez de climatizador y tiene un motor más pequeño que corre menos. La diferencia con los Mazda 3 y Seat León apenas asciende a 600 euros. Los dos corren algo más, sobre todo al acelerar, pero vienen sólo con cuatro airbags y sin otros detalles. Por último, el Astra es 1.600 euros más asequible que el Golf 1.9 TDi, aunque éste incluye el ESP de serie (590 euros en el Opel).
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