Sanidad discrimina a las grandes ciudades al incumplir el plan asistencial previsto hace 20 años

Casi dos décadas después el objetivo de la Ley General de Sanidad no se ha materializado en los núcleos de mayor densidad poblacional: las áreas metropolitanas de Valencia, Alicante y Elche. En estas zonas la asistencia integral al paciente, fin último de la conversión de los ambulatorios en centros de salud que recoge la norma sanitaria estatal, es materialmente imposible porque, según los sectores implicados, la implantación del modelo apenas supera el 65%. A ello se suma la masificación de los centros de salud que limita la atención a los pacientes a un máximo de 7 minutos.

El Sindicato Médico alerta de que la falta de facultativos frustra la asistencia integral

Los sindicatos resaltan que la parcial aplicación del sistema es un síntoma de desigualdad social en el territorio consentida por la Generalitat.

UGT critica que la implantación en la Comunidad Valenciana del nuevo modelo sanitario sustentado por los centros de salud está por debajo de la media nacional. Esta rotunda denuncia no es corroborada por los datos incluidos en la memoria anual correspondiente a 2002 del Comité Económico Social (CES) de la Comunidad Valenciana, órgano consultivo del Consell. No obstante, el CES ya alertó de que las grandes urbes y, por lógica, con mayor población no alcanzan una implantación total, casi 20 años después de la entrada en vigor de la normativa sanitaria. Así, las áreas metropolitanas de Valencia, con un 61,3% de cobertura, la de Alicante, con una cobertura del 72,8%, y Elche, con un 61,8% presentan graves problemas asistenciales. Según el CES, la implantación pasó de un 70,87% en el año 1996 al 87,97% de 2002.

La nueva ley, vigente desde 1986, obligaba a sustituir o adecuar los consultorios en centros de atención primaria. Estas instalaciones fueron diseñadas de acuerdo a un modelo de prestación sanitaria basado en la medicina preventiva y en la atención integral al ciudadano. De esta forma, la modernización de sus medios y la ampliación de personal sanitario permiten, a priori, ofrecer, a diferencia de los ambulatorios, asistencia pediátrica, psiquiátrica y rehabilitación; este último servicio muy valorado por los ciudadanos.

Pero la situación actual está lejos de la descrita en la ley. "El déficit de centros de salud origina un agravio comparativo entre los residentes de los municipios que sí disfrutan de una implantación total del modelo con respecto a los ciudadanos que carecen de éste", apunta el responsable de Sanidad en las comarcas de L'Alacantí y Les Marines de CC OO, Salvador Roig. Los centros basados en el anterior modelo que todavía perviven con los de atención primaria no disponen de la cartera de servicios basada en la prevención que ofrece la Consejería de Sanidad.

Fue precisamente la mejora y la modernización de la red sanitaria pública una de las promesas electorales del PP cuando desembarcó en el Gobierno valenciano. Sin embargo, en opinión de CC OO, nueve años después, poco se ha avanzado en este apartado en los grandes núcleos como Alicante, Elche y Valencia. Por su parte, Miguel Usó, secretario de Sanidad de UGT, es más duro en su diagnóstico. Sostiene que la valenciana se sitúa a la cola de las comunidades en implantación de este modelo.

En cualquier caso, el objetivo para el que fueron concebidos los centros de salud, atender de forma integral a los usuarios, tampoco se ha alcanzado, según denuncian los estamentos implicados. Juan García, vocal del Sindicato Médico de atención primaria de Alicante, señala que con la actual plantilla de personal sanitario es "prácticamente imposible". "Faltan médicos para que el cupo de pacientes sea equilibrado", afirma García. Esta enquistada situación propició el nacimiento de la Plataforma 10 minutos. El colectivo organizó constantes protestas para denunciar la brevedad de las visitas médicas, no más de siete minutos por paciente. El dirigente de UGT reclama un aumento de la plantilla de facultativos en 500 personas, además del consiguiente incremento del personal de enfermería. El sindicalista culpa a los ayuntamientos de no agilizar la cesión de terrenos para la construcción de los centros y a la Generalitat de no consignar la financiación para las obras.

Roig explica que la masificación, por un lado; y el desorden de los recursos humanos y materiales, por otro, son otros de los factores del escaso tiempo que un facultativo dedica a los pacientes. Para el responsable de sanidad de CC OO, "es imprescindible que la Administración cumpla sus compromisos para conseguir que los derechos recogidos en la Ley General de Sanidad en la Constitución sean una realidad" y reclama "una mejor coordinación" entre las Administraciones implicadas.