Apelación perdona a Figo
El comité quita al portugués, que jugará en Riazor, la tarjeta por su entrada a Puyol en el Real Madrid-Barcelona
Figo jugará mañana en Riazor uno de los partidos más decisivos de la Liga después de que la justicia federativa anulara ayer, en segunda instancia, una de las dos tarjetas que vio el domingo durante el encuentro Real Madrid-Barça. El Comité de Apelación quitó al portugués la amarilla que vio por su entrada con la plancha en alto a Puyol. El azulgrana, que sostuvo desde el inicio que fue esa entrada la que le lesionó el ligamento del tobillo y no una posterior de Solari, estará al menos tres semanas de baja. "Figo me tocó, tengo sus tacos clavados, pero ya le dije en el túnel de vestuarios tras el partido que no pasaba nada", afirmó el pasado lunes el defensa del Barça.
El portugués fue sancionado por el árbitro cántabro Alfonso Pérez Burrull primero por discutir con un juez de línea y después por su peligrosa acción sobre Puyol, una entrada a ras de suelo, con el balón dividido, y los tacos por delante. En una primera instancia, el martes, el Comité de Competición no estimó las alegaciones del Madrid y ratificó el castigo de un partido. "Vimos el vídeo de la jugada, para adelante y para detrás, y la cosa era tan evidente que no tuvimos ninguna duda en sancionar a Figo", aseguró uno de los miembros de Competición.
"El Madrid no va a pedir perdón por salir beneficiado", asegura Jorge Valdano
"Era tan evidente que no tuvimos ninguna duda en sancionar a Figo", dijo el martes Competición
Sin embargo, ayer, el Comité de Apelación resolvió lo contrario y dio por buenas las alegaciones del club madridista. Ningún miembro de este comité dio explicación alguna sobre la decisión. Desde la Federación Española de Fútbol, a la que pertenecen los comités, se apuntó simplemente que Apelación se había limitado a dar por bueno el recurso planteado por el asesor jurídico del Real Madrid, Antonio Vázquez. El club remitió un vídeo y alegó que Figo "no tocó" a Puyol, y que por tanto no hubo falta.
Fuentes del Madrid explicaron que "el árbitro observa la jugada a la espalda de Figo, y no puede ver el alcance de la acción". "Sabíamos que el recurso era una lotería", reconoció una fuente del Madrid; "pero no podíamos dejar de interponerlo". Las mismas fuentes añadieron que no recurrieron la primera tarjeta de Figo -sus protestas a uno de los asistentes arbitrales- porque su defensa se consideró más complicada al no tener imágenes que sirvieran para probar la inocencia del jugador.
El club, antes de conocer la medida, ya tenía preparada la solicitud de la suspensión cautelar para ser presentada ante la última instancia posible: el Comité Español de Disciplina Deportiva. El Madrid no necesitó dar ese paso.
Ayer, el Comité de Apelación estimó el recurso y acordó "dejar sin efecto la segunda amonestación y el consiguiente partido de suspensión por doble amonestación impuesta al jugador (...), así como la correspondiente multa accesoria, manteniendo la amonestación que se impuso al citado futbolista por formular observaciones a uno de los árbitros asistentes".
Inmediatamente después del partido contra el Barça, Figo cuestionó la actitud del árbitro. "Ha salido con mala intención desde le principio", dijo. "En la primera tarjeta corrió cincuenta metros sin que nadie le llamase y sin saber lo que le estaba diciendo al línea porque estaba de espaldas. Me sancionó por hablar con el línea. Desde el principio ha estado muy prepotente. Presionado en cada decisión".
El Comité Nacional de Árbitros entendió que estas declaraciones merecían una sanción al jugador. Dieron traslado de ellas al Comité de Competición, que no vio motivos para un castigo. "No hicimos nada", dijo una fuente de este organismo; "porque consideramos que carecían de contenido injurioso".
Figo, tras conocer ayer la anulación de su tarjeta, cambió su discurso contra los árbitros. "No creo que los árbitros actuén de forma premeditada", aseguró en la Cadena Cope. "Hay errores, pero se producen más por presiones que resultan de algunas declaraciones a que se actúe de forma premeditada contra alguien. Los aciertos arbitrales se equilibran al final de temporada, pero está claro que cuando favorecen al Madrid se viene el mundo abajo y si es al revés y nos perjudican parace que no pasa nada".
Consultado al respecto, Manuel Díaz Vega, director del Comité Técnico de Árbitros (CTA), rechazó opinar. En su momento, Díaz Vega salió públicamente en defensa de Pedro Tristante Oliva, el colegiado que pitó el polémico penalti que en su día cometió Marchena, del Valencia, sobre Raúl. Ayer esgrimió para su mutismo que carecía de "elementos de juicio". Su jefe, Victoriano Sánchez Arminio, presidente del CTA, mostró su "sorpresa" por lo decidido por Apelación. "Las decisiones de un árbitro en un terreno de juego se deberían respetar y debe ser de las primeras veces, sino la primera, que se levanta una sanción con un lesionado de por medio". "Además", subrayó Sánchez Arminio, "no es necesario que haya contacto para que haya sanción" cuando hay juego peligroso.
Al conocer el levantamiento del castigo a Figo, el director general deportivo del Madrid, Jorge Valdano, declaró a la cadena SER: "Estamos muy satisfechos. Recuperar a Luis significa recuperar a uno de los jugadores de más categoría y más en forma del Real Madrid. Era una decisión que esperábamos y por eso habíamos recurrido. Las imágenes hablaban por sí solas".
"No temo ninguna reacción", manifestó Jorge Valdano. "El Real Madrid no va a pedir perdón por salir beneficiado de una decisión que otras veces nos ha perjudicado. No veo dónde está el agravio comparativo".
Desde Barcelona, Cocu, otro de los capitanes del club junto al propio Puyol y Luis Enrique, también expresó su "sorpresa" por la decisión y afirmó: "Yo he visto el taco en el tobillo de Puyol y todos los colores", en alusión al morado en la piel tras la colisión en el hueso. Puyol no quiso hacer ayer ningún tipo de valoración sobre el indulto a Figo.
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