La lista de correo Pepitolista actúa de vivero de creaciones culturales

En un principio, comenzó como un mero instrumento de comunicación para que varias personas de la misma empresa clausurada no perdieran el contacto. Poco a poco se fue añadiendo gente, internautas que encontraban esa dirección navegando por la Red y que se sentían identificados con los temas que tocaban. Hoy en día, la lista de correo Pepitolista mueve a unas 150 personas que se intercambian diariamente más de 200 correos.

Esa lista ágil y concurrida actúa como un foro de intercambio de ideas, y de ella salen proyectos diversos, todos en torno al mundo de la cultura. Aunque sus usuarios también la utilizan para otros menesteres más prosaicos, como preguntar cómo curar el ojo de una mascota.

Hace un par de años, Diego Sanz, Karramarro, un diseñador gráfico bilbaíno de 31 años, tropezó con la Pepitolista en Internet y, desde entonces, se ha convertido en uno de sus participantes más activos. "Primero conoces a la gente por la Red, pero luego nos conocemos en persona y quedamos en una ciudad o en otra. Hay de todo, músicos, fotógrafos, diseñadores, programadores..., gente que tiene interés por la creatividad. Somos una comunidad virtual y actuamos como tal", explica Sanz, que trabaja, con otros tres socios, en la empresa de diseño gráfico y páginas web Vudumedia.

Él es también uno de los 15 que formaron la asociación Bípedos y Dígitos. "Todos hemos salido de la Pepitolista. La mayoría somos de Bilbao y Barcelona, aunque hay gente de otros puntos de España", comenta Sanz.

Bípedos y Dígitos se formó con la excusa de realizar un número conmemorativo de la revista de Barcelona Fíjate (cuyos números se pueden encontrar en las bibliotecas de museos como el Macba, el Reina Sofía o el MOMA), que se llamó FijateX, por los 10 años que se cumplían de aquel proyecto. FijateX es una compleja y divertida revista hecha a mano, y marca el punto de partida del trabajo a Bípedos y Dígitos. Al ser artesanal, se ha publicado un número limitado de ejemplares, pero se encuentra también en su página web.

El segundo proyecto de la asociación es Un día en el planeta... Txapelpixel, otra revista artesanal, encuadernada a mano, que tiene como motivo central al muñeco Txapelpixel, una creación de Sanz. Se han realizado 50 ejemplares y cada uno es una pequeña joya. Para su elaboración, los miembros de Bípedos y Dígitos se citaron un fin de semana en Bilbao y entre ellos se ha distribuido la exigua tirada.

Sanz asegura que la Pepitolista reúne a personas con inquietudes similares que están juntas "por amor al arte". De ese vivero de inquietos creadores surgen otras iniciativas.

Bisions es una página que funciona como sala de exposiciones de fotografía. "Las personas que quieren cuelgan en esa página dos fotografías, con su título y fecha. Las dos imágenes tienen que tener un nexo de unión", indica Sanz.

Otro proyecto en la Red, Jaque, trata de una revista literaria abierta a colaboraciones. "Sale cuando puede y ya va por el número 15", dice Sanz. El primer congreso miniOn saldrá también de Pepitolista. Aún no se sabe cuándo, pero sí que será en Madrid. En el congreso se enseña diseño, programación, cómo hacer carteles, "de todo y gratuito", apunta Sanz.