España logra un cambio satisfactorio en las ayudas al algodón y el aceite
Habrá 20 millones para el olivar y se mantendrán las algodoneras más productivas
El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero ha hecho valer en la UE su confeso europeísmo para lograr una rectificación satisfactoria en sus demandas agrícolas. Siguiendo los dictámenes de sus respectivas capitales, los 15 expertos de la Unión, reunidos ayer en el Consejo Especial de Agricultura, modificaron el acuerdo político del jueves pasado y otorgaron a España un cambio para el algodón aceptable para sus intereses. También una ayuda adicional de 20 millones de euros anuales para el olivar que la UE había retirado al votar España contra el paquete global de los acuerdos.
"Ésta es la prueba de que el compromiso europeísta da resultados", proclamó el nuevo director general de Comunicación del Área de Internacional, Javier Valenzuela, que ayer acompañó a la ministra de Agricultura, Elena Espinosa, a su segundo Consejo europeo en menos de una semana. El Gobierno de Zapatero, según otras fuentes, se movilizó el pasado jueves, tras cerrarse el frustrante acuerdo, para reclamar el apoyo de los grandes de la Unión una vez abandonadas las directrices más atlantistas del Gobierno del PP. El Ejecutivo alemán fue uno de los primeros contactados para reclamarle un gesto consecuente con la nueva situación.
El nuevo ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, abundó ayer en esta idea al manifestar que el acuerdo de la semana pasada, recibido con "estupor" en Madrid, era poco comprensible cuando los socios europeos esperan cambios en la posición española sobre la Constitución europea. "Nos tienen que animar", señaló.
Situación comprometida
El campo, en fin, estaba abonado para lograr una rectificación que cuenta con pocos precedentes, si bien tampoco es usual que la UE apruebe una reforma con el voto en contra del país más afectado por ella, como ocurrió el jueves con el aceite (España es el mayor productor de Europa) y el algodón (sólo Grecia y España lo producen en Europa, pues Portugal tiene una producción casi testimonial). La Comisión, la presidencia irlandesa y algunos socios, Francia entre ellos, eran conscientes de que habían dejado a España en una situación demasiado comprometida.
Elena Espinosa agradeció ayer el esfuerzo de la Comisión, que ha trabajado codo con codo con España para encontrar una solución legal y adecuada. Durante el fin de semana, el Ministerio de Agricultura español hizo llegar a sus socios su propuesta: reducir de 85.000 a 70.000 el número máximo de hectáreas elegibles (o subvencionables) y, paralelamente, elevar de 852 euros a 1.039 euros la prima por hectárea. Esta fórmula, según explica la delegación española, permitirá mantener las explotaciones más productivas, pues el acuerdo anterior no garantizaba la continuidad de la actividad, por lo que ponía en riesgo, dicen, el sustento de casi 10.000 familias.
La reunión del Consejo Especial de Agricultura duró ayer ocho horas ininterrumpidas, aunque fuentes de la negociación aseguran que no se debió sólo al debate sobre España, sino a que varias delegaciones pidieron aclaraciones sobre los textos.
Una vez despejado para España el problema del algodón, cuyas ayudas quedan desligadas de la producción a partir de 2006 en un 65%, Espinosa ya podía aceptar los 20 millones de euros que sus socios ofrecían para apoyar el olivar español, que ha acrecentado su rentable producción en los últimos años. "Quizá les parezca una cantidad insignificante", dijo Espinosa, cuya primera demanda se elevaba a 119 millones, "pero es la primera vez que España consigue un aumento de las ayudas al aceite frente a su principal competidor, Italia".
En el acuerdo del jueves pasado se otorgaron también 19 millones de euros más a las nuevas plantaciones de Portugal y un millón a Francia. España ya se lleva actualmente unos 1.000 millones anuales en ayudas europeas sólo para el olivar y, con la reforma aprobada, entre el 60% y el 90% de las ayudas quedarán desligadas de la cantidad producida, lo que España considera positivo.
La UE adoptó los nuevos términos del acuerdo a cambio de que España se abstenga en vez de votar en contra, como hizo, en la reforma del algodón y el aceite. La buena nueva se ratificaría sin debate este jueves en el próximo Consejo Europeo de Justicia e Interior, cuando todavía no voten los 10 países que el sábado se incorporan a la UE. España renunciaría a presentar el recurso anunciado.
[La Junta de Andalucía se alegró ayer de la "vuelta sustancial" que Bruselas ha dado a las reformas del aceite y el algodón. El consejero de Presidencia, Gaspar Zarrías, destacó los 20 millones de euros más que va a tener el olivar y el incremento por hectárea de las ayudas al algodón.]
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