El malagueño Gaby Beneroso estrena 'Las huellas que devuelve el mar', su primer largo metraje

El director malagueño Gaby Beneroso presentó ayer en ZonaZine, la nueva sección del Festival de Cine Español de Málaga, Las huellas que devuelve el mar, película que supone el salto a la dirección de largometrajes de Beneroso, hasta ahora dedicado a los cortometrajes. La cinta, rodada íntegramente en Málaga y Almería "con poco dinero y mucho, mucho esfuerzo", según su autor, relata las peripecias vitales de un grupo de personajes que conforme avanza el verano acaba meditando sobre el sentido de sus vidas y las pesadas cargas que arrastran.

Nervioso y paparetado tras la ironía y sentido del humor del actor sevillano Álex O'Dogherty y las tablas de Cayetana Guillén Cuervo -dos de los protagonistas de Las huellas que devuelve el mar-, Beneroso defendió su primer largometraje como una película "muy intimista" que quizá no sea muy propicia "para el circuito comercial". "Las huellas que devuelve el mar ha salido gracias al esfuerzo de todos. Ningún actor ha cobrado e incluso las empresas de sonido y demás han hecho lo mismo, por eso ha salido la película", explicó ayer el director malagueño. "La copia que está aquí es la única que hay y casi ni llega, porque el viernes pasado aún no era seguro que estuviese lista, pero unos amigos han ayudado para que llegase aquí", confesó para resaltar las dificultades económicas por las que ha atravesado tanto en el rodaje como en la fase posterior a éste.

Las huellas que devuelve el mar cuenta la historia de Sara (Marian Aguilera), Carlos (Armando del Río), Laura (Cayetana Guillén), Emilio (Antonio Dechent) y de otros personajes que, como ellos, se ven azotados por los fantasmas que llevan ocultos mientras conviven en un pequeño pueblo costero durante un caluroso verano. "No son personajes en crisis, son sólo gente normal que saca lo que lleva dentro, pero ni son depresivos ni están en crisis", señaló Beneroso sobre el perfil de los protagonistas de esta historia, de la que también ha sido guionista. "El guión lo he escrito en cinco días, algo que no hay que hacer y creo que por falta de tiempo algunos personajes han quedado quizá demasiado literarios", se excusó para, acto seguido, defender el carácter "intimista" y preciosista de la cinta. "Utilizo muchos símbolos cinematográficos. Hay metáforas machadianas, como el mar, que es la muerte, y los largos caminos vacíos, que simbolizan la vida", añadió.

Satisfacción

"Pese a lo mucho que ha costado, era la película que queríamos hacer y, al final, la hemos hecho. Sólo por eso habrá merecido la pena todo lo que hemos pasado, aunque no la vea mucha gente", indicó Beneroso, quien afirmó tener avanzadas negociaciones para que su película se distribuya por salas de todo el país.

Por su parte, los actores y actrices coincidieron en señalar lo especial que ha sido rodar bajo las órdenes de Gaby Beneroso, pese a que las condiciones del rodaje hayan sido muy duras. "Ha sido una locura, no me creo que la cinta esté aquí. Me juré que no haría algo más loco que El factor Pilgrim, y lo he hecho", aseguró entre risas Álex O'Dogherty, quien además de interpretar al hijo algo apocado de Dechent es el autor de la música de la película.

Más cariñosa con Beneroso se mostró Cayetana Guillén Cuervo, quien con esta cinta ya ha hecho doblete en el festival tras presentar el pasado viernes La mirada violeta, que protagoniza. "Gaby [Beneroso] me habló de un pequeño papel en un corto y acepté encantada. Luego se convirtió en un largo y lo hice por confianza en su talento y por querer acompañarle en el arranque de su carrera. Estoy entusiasmada por haber sacado adelante el proyecto y compartirlo con él y mis compañeros pese a lo duro que ha sido todo", relató la actriz.