El Gobierno aprueba un tercio de las leyes previstas en la legislatura
Proyectos como el del Agua, Suelo y Municipal siguen en el aire
Cuando sólo queda un año para que concluya la actual legislatura autonómica, el Gobierno sólo ha sido capaz de sacar adelante 10 de los 36 proyectos de ley recogidos en su programa legislativo para el periodo 2001-2005, es decir un 27%. Aunque es factible que de aquí al final del mandato, el Ejecutivo consiga que el Parlamento apruebe alguno más, parece difícil que mande a la Cámara los proyectos básicos e históricos, como el del Suelo, Agua y Municipal, que siguen durmiendo en algún cajón del Ejecutivo.
En el caso de la propuesta sobre el Suelo, elaborado por el Departamento de Vivienda que dirige IU, desde hace cinco meses está siendo supervisado por la Comisión Jurídica Asesora del Gobierno, el órgano que determina la legalidad de todas las iniciativas que salen del Ejecutivo vasco. Este es el proyecto estrella del departamento dirigido por Javier Madrazo, que varias veces ha anunciado su próxima remisión a la Cámara ante las insistentes demandas de la oposición. Sin embargo, el dictamen jurídico se hace esperar. Los responsables de Vivienda confían en que la propuesta salga adelante antes de las elecciones autonómicas de mayo de 2005. Aunque los problemas para aprobar los proyectos de ley radican en la minoría que sufre el Gobierno en la Cámara, el de Suelo ha encontrado las dificultades en el seno del propio Ejecutivo, donde el PNV no comparte alguno de los principios introducidos por IU.Peor suerte podrían correr los proyectos Municipal y de Agua, de los que ni siquiera se ha oído hablar a lo largo de toda la legislatura. Su gran complejidad, que requiere hilar muy fino dado que ambas iniciativas implican a todo el entramado institucional de Euskadi y al delicado reparto de poder que existe entre las administraciones de la comunidad, exige un consenso muy importante con la oposición.
En estos momentos, con un Parlamento centrado en el debate del plan Ibarretxe y un desencuentro evidente entre el tripartito y PSE-EE y PP, parece que no queda espacio para debatir otras cuestiones, en las que la comunidad autónoma tiene amplias competencias, como la sanidad, la educación e infraestructuras.
De los diez proyectos de ley aprobados por el Parlamento entre la relación de 36 que espera sacar adelante el Ejecutivo, sólo la Ley de Universidades tiene una relevancia social muy importante. El rocambolesco proceso que llevó a su definitiva aprobación, con la presentación de una proposición de ley por parte de los grupos parlamentarios de PNV, EA e IU, después de que fuera tumbado el proyecto de ley del Gobierno, refleja las dificultades que atraviesa el diálogo entre los partidos en la Cámara.
21 leyes aprobadas
En la escala de importancia, siguen a la Ley de Universidades, la de Parejas de Hecho y la del Estatuto del Consumidor. El resto quedan en un segundo término en cuanto a magnitud: Ley de Transporte de Viajeros por Carretera, modificación del Plan General de Carreteras, modificación de la Ley de Derechos Sociales, Testamento Vital, Agencia de Protección de Datos, Cuerpos y Escalas de los funcionarios y la Ley de Procedimiento de elaboración de disposiciones de carácter general.
En total, el Parlamento ha aprobado 21 leyes (incluidas las diez anteriores) desde que echó a andar la legislatura en 2001. Pero dentro de esas 21 normas hay que incluir varias modificaciones a las leyes ya existentes y la aprobación de los presupuestos para el año 2003, que fue fruto de la ausencia del parlamentario y presidente de honor del PP vasco, Jaime Mayor Oreja. Esa baja le permitió al Gobierno disfrutar de mayoría, sacar las cuentas y ahorrarse otra prórroga presupuestaria, con el desgaste que eso hubiera supuesto.
Mientras el Gobierno achaca la falta de producción legislativa a las coincidencias interesadas de PP, PSE-EE y Sozialista Abertzaleak que bloquean la actividad, la oposición acusa al Ejecutivo de tener otras prioridades diferentes a la de enviar proyectos de ley a la Cámara. Uno de los parlamentarios que más iniciativas ha presentado en la Cámara para que el Gobierno mande proyectos es el portavoz del PSE-EE, Rodolfo Ares, quien denuncia que el Ejecutivo "incumple" reiteradamente los mandatos parlamentarios. "El tripartito tiene unas prioridades diferentes a las de elaborar proyectos de ley básicos para la comunidad autónoma".
Mayoría de apoyos del PSE
Ares reconoce la dificultad de alcanzar acuerdos en el Parlamento, pero recuerda que "la máxima responsabilidad de intentar los pactos con la oposición es de quien gobierna". En su opinión, "el Gobierno no quiere correr el riesgo de debatir en el Parlamento sin garantías de que sus proyectos vayan a salir adelante".
Aunque los acuerdos están muy caros, 11 de las 21 leyes aprobadas por el Parlamento han contado con el apoyo del PSE-EE. Dentro de la oposición, el Partido Socialista de Euskadi es el que más ha transaccionado con el Ejecutivo. En cambio, el PP sólo ha votado a favor de cuatro leyes y Sozialista Abertzaleak de tres.
Sin embargo, la abstención o la ausencia de los parlamentarios de la ilegalizada Batasuna ha jugado un papel fundamental en alguna ocasión para que un determinado proyecto de ley salga adelante, como ocurrió con la Ley de Universidades. Su abstención, después de que el tripartito le aceptara más de 50 enmiendas, allanó totalmente el camino.
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