Los jóvenes navarros se declaran por primera vez agnósticos

Por primera vez en la historia de Navarra los jóvenes agnósticos y ateos superan a los que se declaran creyentes y de entre estos, apenas un 14,6% acude a las misas dominicales. La juventud de la Comunidad foral no concede credibilidad a las instituciones y la peor valorada es la Iglesia. El desencanto alcanza su punto más distante con respecto al hecho religioso, que para el 61,3% de los encuestados carece de interés alguno.

La encuesta que desde hace veinte años viene realizando la Fundación Bartolomé de Carranza refleja que los jóvenes de entre 15 y 29 años sienten una enorme indiferencia hacia la política y las instituciones. Además, siguen viviendo con sus padres en un 75% y se sitúan más en la izquierda ideológica (41%) que en la derecha (10%) o el centro político (30%). Más de la mitad ha probado drogas, se casan menos y han duplicado el número de parejas de hecho. Eso sí, defienden conceptos morales universales.

De la Navarra orgullosa de ser la tierra con mayor número de monjas y misioneros repartidos por el mundo se ha pasado a una Navarra cuyos seminarios e iglesias están prácticamente vacíos de gente joven.

Hoy en día en Navarra los jóvenes se declaran agnósticos en un 31,4%; ateos en un 21,6% y creyentes en un 44,7%. Cuando hace veinte años la fundación Bartolome de Carranza comenzó a sondear la opinión de los más jóvenes la situación era muy distinta. Los resultados de la quinta encuesta, realizada el pasado año a 1.606 jóvenes, hablan de cambios muy acentuados, sobre todo en relación con la política, al religión y el sexo. Si en 1980 las relaciones prematrimoniales eran casi inexistentes, actualmente el 88% reconoce tenerlas. Casi el 30% se inicia en ellas antes de los 18 años y la mayoría las vincula a una fuente de placer y diversión. Esta es, además, la juventud "más pacífica y preparada" de la historia, según señala el psiquiatra Vicente Madoz, presidente de la fundación.

Los problemas para independizarse por la carestía de la vivienda y la precariedad laboral hacen que la adolescencia se haya estirado hasta los 27 años y ocho meses por término medio. Ello ha influido en el creciente deseo de independencia que aduce uno de cada tres jóvenes, que se iría de casa si pudiera. Al igual que los restantes jóvenes españoles, los navarros están preocupados por su empleo, ya que un 75% tiene contratos temporales.de quienes trabajan tiene contratos eventuales que no se corresponden con su formación y cobran 790 euros de media.

A los jóvenes les preocupa su salud y por eso han dejado de fumar (lo hace el 33,8%) y un 58% practica deporte regularmente. Sin embargo, uno de cada cinco reconoce "beber al límite" los fines de semana, el 55,8% ha probado drogas y crece el porcentaje (33%) de quienes han mezclado cannabis, anfetaminas o cocaína con alcohol.

Uno de los aspectos más inquietantes de la encuesta es que el 40,4% reconoce haber cometido alguna vez un delito contra la seguridad del tráfico. De hecho, un tercio ha sufrido algún accidente, si bien en la mitad de las respuestas atribuyen la responsabilidad a terceros. Más de la mitad de ellos ha confesado haber cometido en alguna ocasión delitos, sobre todo relacionados con el hurto y el orden público.