No me mires
Hoy en día lo que prima en el sector público valenciano es el despilfarro sobre el gasto social.
Así, en la Comunidad Autónoma de Valencia, fuertemente endeudada, faltan escuelas, colegios, hospitales, centros de atención geriátrica... Sin embargo hay una fuerte apuesta por las obras faraónicas, véase la Ciudad de las Artes y de las Ciencias de Valencia, Terra Mítica, en Benidorm, y en un futuro la Copa del América, que transformará todo el puerto de Valencia.
Para interpretar esta relación hay que darse cuenta que cualquier sector que gasta más de lo que recibe como renta, tiene que endeudarse para pagar el exceso de gasto.
Todo es maquillar las cuentas pero la Generalitat Valenciana paga a sus acreedores con más de 18 meses de retraso. A este paso la bancarrota del Estado asoma las orejas.
Tarde o temprano veremos las canas de Aznar, Zaplana y Cía.
