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Botella: "Todos pensamos que era ETA. Era imposible otra autoría"

La esposa de Aznar presenta su libro 'Mis ocho años en La Moncloa'

La cita fue en el hotel Palace. A la entrada se agolpaban un montón de coches oficiales que dentro de sólo un par de semanas trasladarán a otros inquilinos. Dentro se presentaba el libro Mis ocho años en La Moncloa escrito por Ana Botella, la esposa del presidente del Gobierno en funciones, José María Aznar, con la ayuda del "joven periodista Álvaro del Corral". Acudió la plana mayor del PP, es decir, el Consejo de Ministros en funciones, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón. Y su líder, Mariano Rajoy. También muchos simpatizantes, aunque muy pocos eran jóvenes.

Rodrigo Rato, vicepresidente primero en funciones a quien Botella se refiere en el libro como un buen amigo suyo y de su marido, hizo de maestro de ceremonias. Presentó el libro, y habló de sus dos amigos. "Jose, vas camino de ser el marido de Ana Botella", le dijo a Aznar. Según Rato, el libro cuenta "la historia del PP en estos ocho años vista desde el otro lado del espejo".

"Que al final de ocho años se acabe con esto, pues te pones a pensarlo y es horrible"

La autora aseguró que ha intentado relatar los "momentos alegres, ásperos y dolorosos" de su paso por La Moncloa. Pero que después de impreso llegó lo peor. "Todavía estamos entristecidos todos los españoles y todos los madrileños por la matanza vivida". Esa matanza y la sensación de que el poder se desvanece como la carroza del cuento al sonar las doce campanadas marcaron el acto de ayer.

Botella concluía su libro con un párrafo sobre las plantas de lavanda y las adelfas blancas que planea plantar en su nueva casa. Estaba previsto como una biografía de anécdotas con cuatro "peores momentos": el 11 de septiembre de 2001, Perejil, el Prestige e Irak. E iba a ser presentado tras las elecciones que el PP confiaba en ganar y que habrían culminado la sucesión de Aznar que su esposa relata a retazos.

Pero hubo un 11 de marzo y todos esos planes explosionaron. Tanto que el libro, editado por Plaza y Janés y ya impreso, ha quedado ampliado con una adenda, a modo de cuadernillo, titulada Capítulo cero: 11-M. En él, Botella trufa el relato de cómo vivieron ella y su marido los cuatro días que cambiaron España con una encendida defensa de que "el Gobierno no mintió ni manipuló información", sino que fue víctima de un intento de "vilipendiar su honorabilidad".

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"Se ha tratado de destrozar a mi marido más allá de la política", concluye tras reproducir, como prueba de la honestidad del Ejecutivo, uno de los dos documentos del CNI que el Gobierno desclasificó el 18 de marzo. El que comienza diciendo: "Se considera casi seguro que la organización terrorista ETA es la autora de estos atentados".

La afirmación: "Todos pensamos que el atentado era obra de ETA. Era imposible pensar en otra autoría", aparece reiteradamente a lo largo de todo el relato. Como una convicción moral, como una deducción lógica avalada por la experiencia... Y aunque se va diluyendo con el paso de las horas, ETA siguió siendo, según la descripción de Ana Botella, la hipótesis principal hasta que se traduce el vídeo hallado cerca del Tanatorio de la M-30. "En el mismo instante en que se tuvo la traducción, se decidió que compareciera el ministro del Interior para anunciar que Al Qaeda había reivindicado la masacre". Ángel Acebes dio esa información ya en la madrugada del domingo, horas antes de la apertura de las urnas.

"Pero antes de eso ya había manifestaciones frente a las sedes del PP acusando al Gobierno de mentir", lamenta Botella. "Un político socialista compareció ante los medios de comunicación para decir que era mejor tener un Gobierno que dijera la verdad". Y enfatiza: "Este Gobierno había estado diciendo la verdad desde el primer instante".

Botella define la jornada de reflexión como un día de "furia organizada". Cuenta que comieron en La Moncloa con Mariano Rajoy y su esposa, Elvira Rodríguez, y con Rodrigo Rato. Que cuando a las cinco de la tarde se despidió de Rato comenzaron "las horas más amargas" de toda la vida política de los Aznar. "Que al final de una labor de ocho años se acabe con esto, pues te pones a pensarlo y es horrible", confiesa.

Tras asumir la hipótesis de Al Qaeda como autora de la cadena de atentados del 11-M, Botella defiende la participación española en la guerra de Irak: "Cuando existe una solidaridad de todo el mundo y la seguridad de que es Irak donde el terrorismo tiene una de sus bases principales, y cuando se sabe que nosotros llevamos años luchando contra la amenaza terrorista, no puedo entender que haya gente que no quiera que estemos al lado de los que quieren luchar contra el terrorismo".

Y, finalmente, cuenta la derrota electoral del PP. "El recuento fue rapidísimo y a eso de las nueve y media nos dimos cuenta de que habíamos perdido las elecciones". Al comprobar "que aquello iba fatal" decidieron "ir a la sede a dar un abrazo a Mariano y a Viri" (diminutivo con el que se conoce a la mujer de Rajoy).

Sobre la debacle "hicimos la reflexión de que habíamos tenido 9,6 millones de votos aunque nos habían sacado del mapa en Cataluña, en el País Vasco y en Andalucía". La expresión "nos intentaron sacar del mapa" fue una de las más repetidas por Aznar en la campaña de las elecciones municipales y autonómicas de mayo pasado. Entonces no ocurrió.

Ana Botella y Rodrigo Rato, ayer, en la presentación del libro de la esposa de José María Aznar.
Ana Botella y Rodrigo Rato, ayer, en la presentación del libro de la esposa de José María Aznar.RICARDO GUTIÉRREZ

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