Colonia y diseño para mujercitas
Alrededor de Barbie, la famosa muñeca e icono de moda de la empresa americana Mattel, se ha creado todo un mundo de consumismo que representa unos 4.000 millones de dólares, según su vicepresidente, Richard Dickson, y que incluye Barbie Style, la marca de moda para niñas de 4 a 10 años; una línea de Barbie Couture para adultas (de momento, sólo se vende en Japón), y una nueva fragancia, Barbie Eau de Toilette, dirigida a niñas y producido y distribuido por la firma española Puig (tambien fabricante de Paco Rabanne, Carolina Herrera y Nina Ricci) y que saldrá en el otoño envasado en una botella de cristal transparente con una rosa como tapón, con la cual proyectan ganar entre 40 y 50 millones de dólares en los próximos cuatro años. A lo largo de sus 45 años recién cumplidos, Barbie ha lucido creaciones de los diseñadores más prestigiosos, como Armani, Dior, Pertegaz, Burberry, etc., y era lógico que la ropa para niñas también contara con figuras conocidas. Por eso Mattel ha elegido al galés Julien MacDonald, conocido sobre todo por sus creaciones sexys y glamurosas de su propia firma y también diseñador de Givenchy, quien ha vestido a estrellas de cine como la galesa Catherine Zeta Jones, para crear la primera línea fiesta para niñas de verdad dentro la colección otoño-invierno Pink Dolls o Muñecas Rosas, que se presentó en Londres hace tres noches a orillas del río Támesis con desfile inclusive. Sobre la pasarela, las jovencitas vistieron un estilo rock glam muy cañero, mezclando piezas de punto, vaqueros, cazadoras, pantalones y bombers de satén en negro o morado, con capuchas imitando piel, vestidos estampados de tigres y cebras cortados al bies con volantes en bajos, anudados al cuello y todo bordado con cristales de Swarovski y lentejuelas, complementados con botas y sombreros vaqueros. De momento se venderá en el reino Unido y, dependiendo del éxito, puede extenderse a más países y en el futuro contar con otros diseñadores. En cuanto a Barbie, quien ha roto con su novio, Ken, de toda la vida (aunque siguen siendo amigos), dicen que su nuevo amor es Blaine, un surfero australiano muy bronceado y de pelo rubio castaño..., ya que la vida sigue igualmente en el mundo fantástico de los muñecos.-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.