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El Kelme, excluido del Tour

La ronda francesa rechaza invitar al equipo español al considerar que no pueden ser falsas todas las denuncias de Manzano

Juan Morenilla

El equipo ciclista del Kelme recibió ayer otro duro golpe. La organización del Tour de Francia aseguró que no invitará el conjunto que dirige Vicente Belda a su próxima edición, del 3 al 25 de julio, como en principio había decidido a pesar de su crisis económica. Las confesiones de dopaje del ex corredor del Kelme Jesús Manzano han sido el detonante. "El Kelme se ha acabado para nosotros. No todo puede ser inventado", afirmó ayer el director del Tour, Jean-Marie Leblanc. "Es el precio que nos toca pagar y el favor que nos ha hecho", explicó Belda en referencia a Manzano. La Generalitat Valenciana, que patrocina al conjunto alicantino, ha abierto una investigación, como también ha hecho el Consejo Superior de Deportes.

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La entrega por capítulos de Jesús María Manzano en el diario As, en los que relata con todo detalle cómo se dopaba durante sus tres temporadas en el equipo ciclista Kelme, ha abierto un escándalo mayúsculo. La última consecuencia es su exclusión para la próxima edición del Tour de Francia, según anunció ayer la organización de la carrera francesa. "A la vista de las revelaciones del corredor español Jesús Manzano, los organizadores del Tour de Francia han estimado que la duda creada no permitía considerar la presencia del equipo Kelme en la próxima edición de la carrera", difundió ayer el Tour en un comunicado.

La carrera francesa anunció el pasado 27 de febrero el nombre de los últimos equipos invitados a la prueba, del 3 al 25 de julio, y reservó una última plaza, la número 22, para el Kelme si éste resolvía sus problemas económicos con la Unión Ciclista Internacional (UCI). El conjunto alicantino, descendido a Segunda División por las deudas con sus corredores, recibió el espaldarazo salvador de la Generalitat Valenciana, que lo subvenciona con 1,8 millones de euros. El gobierno autonómico superó sus dudas e imitó a otras administraciones, como la balear y la vasca, en su patrocinio a equipos ciclistas (Banesto Illes Balears y Euskaltel Euskadi, respectivamente), y evitó así la desaparación del Kelme.

La invitación para el Tour estaba sobre la mesa, pero las revelaciones de Manzano la han enviado a la basura. "No habrá 22 equipos en el Tour de Francia", dijo ayer Jean-Marie Leblanc, director de la carrera, "el Kelme ha acabado para nosotros. Aunque sólo hubiera un 10 o un 20 por ciento de verdad en sus declaraciones [de Manzano], eso ya sería demasiado. He creído comprender que este chico tiene una mala reputación, pero no se lo ha podido inventar todo. Ha creado una capa de sospecha en torno al equipo, y por eso no puede permanecer en el Tour. Nosotros mantenemos una lucha contra el dopaje". Según Leblanc, el Tour se correrá con 21 conjuntos.

La exclusión de la ronda gala es el último golpe de una dura serie de consecuencias para el Kelme tras las confesiones de Manzano. La principal, como se desprende de la decisión de la carrera francesa, la sombra de sospecha que acompaña ahora al conjunto alicantino. La Generalitat Valenciana anunció ayer que ha ordenado abrir una investigación para aclarar los hechos, como también ha hecho el Consejo Superior de Deportes, "por la vía judicial, debido a la gravedad de los hechos". "Queremos saber si existieron esas prácticas antes y si se siguen dando en la actualidad. No quiero que exista ni una sombra de duda en el equipo", aseguró ayer el consejero de Cultura, Educación y Deporte de la Generalitat, Esteban González Pons, quien expresó su "máxima confianza" en los técnicos del Kelme. "Confío en Vicente Belda y en todo su equipo. Este tema es una venganza personal. No sólo hay que ser limpio, sino también parecerlo", añadió Pons.

El Kelme se ha puesto a disposición de la Comisión Nacional Antidopaje para echar luz sobre las prácticas denunciadas por Manzano, y se encuentra a la espera de conocer la alteración de su calendario en función de posibles invitaciones o no a las carreras, ya que su exclusión de la élite ciclista, el conocido grupo como GS/I, no le garantiza su participación directa. Rcs Sport, la sociedad organizadora del Giro de Italia, ha confirmado que se reserva el derecho de invitar al Kelme a su próxima edición, y la Federación Española de Ciclismo ha abierto otro expediente.

El Kelme reaccionó ayer entre incrédulo e indignado a la decisión del Tour: "Son libres de invitar a quien quieran y hay que respetarlo, pero ésta es la factura que nos toca pagar, y el favor que nos ha hecho el corredor. El asunto está en manos de la justicia, que pondrá a cada uno en su sitio. Yo tengo la conciencia tranquila", dijo el director del equipo, Vicente Belda, que defendió a sus ciclistas: "No somos drogadictos. El dopaje existe en todos los deportes, y Manzano no cuenta la verdad. Tendrá que demostrar que todo lo que ha dicho es cierto. O estamos del lado de las falsedades o del lado de los que amamos el ciclismo. Hasta la propia UCI sabe que es un chantaje".

Ganador de la Vuelta a España en 2000 y 2002, el Kelme celebra esta temporada sus 25 años de historia. De momento, envuelto en una enorme polémica y excluido del Tour.

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Sobre la firma

Juan Morenilla
Es redactor en la sección de Deportes. Estudió Comunicación Audiovisual. Trabajó en la delegación de EL PAÍS en Valencia entre 2000 y 2007. Desde entonces, en Madrid. Además de Deportes, también ha trabajado en la edición de América de EL PAÍS.

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