La primavera escénica donostiarra acoge estrenos de tres grupos vascos

Miguel Delibes escribió sobre la vida de Mario Díez Collado por boca de su viuda Carmen en su legendaria Cinco horas con Mario. La compañía Traspasos le resucita ahora para reescribir la historia en Mario por alusión, montaje que abre el 2 de abril la programación primaveral de artes escénicas de San Sebastián. La oferta suma 22 espectáculos de teatro y danza en 60 funciones y 10 conciertos. El cartel incluye Canciones de amor y de droga, de Albert Pla, y los estrenos de tres grupos vascos: Paradero desconocido, de Tanttaka; El Decamerón, de Ados, y Tío Vania, de Teatro Estudio de San Sebastián.

La programación "es un pequeño juego de equilibrios entre producciones vascas y de fuera; montajes más o menos comprometidos en distintos aspectos y propuestas con tirón para el público, siempre dentro de unos parámetros económicos razonables", explicó ayer el responsable de Teatro de Donostia Kultura, Norka Chiapusso, cuando se le preguntó sobre los criterios que guían el diseño del programa de artes escénicas. El resultado es una oferta de marcado acento teatral que mira casi tanto al pasado como al presente.

De hecho, ninguna de las tres compañías vascas que estrenan espectáculo esta temporada se ha inspirado en nuevos textos. Tanttaka representará entre el 22 y el 25 de abril en el Teatro Principal Paradero desconocido, obra escrita en 1938 por la estadounidense Katherine Kressmann, bajo el seudónimo masculino de Taylor, al ver los perversos efectos del nazismo en las calles de Nueva York. Ados Teatroa va aún más lejos: ha escogido diez cuentos de El Decamerón, escrito en el siglo XIV por Giovanni Bocaccio, para hablar de "amores deshonestos, pasiones, celos, adulterios" sobre el mismo escenario entre los días 3 y 6 de junio. Y Teatro Estudio de San Sebastián se presentará en el Palacio Miramar entre el 21 y el 23 de mayo con Tío Vania, obra que Chejov, autor que revolucionó la dramaturgia rusa, estrenó en el Teatro del Arte de Moscú en 1899. También Teatro de la Abadía propondrá una aproximación a los clásicos con Garcilaso, un espectáculo que tiende un puente sobre cinco siglos para invitar al espectador a reflexionar sobre los valores del ciudadano del siglo XXI.

La programación, presentada ayer oficilamente por el concejal de Cultura, Ramón Etxezarreta, se cerrará en el Principal con La ratonera, de Txalo. Pero hasta entonces, servirá de escaparate tanto de propuestas nacionales como extranjeras. Entre el 16 y 18 de abril, Albert Pla presentará Canciones de amor y de droga, un montaje de teatro y música sobre la obra del pintor, poeta y compositor Pepe Sales; Florinda Chico se despedirá del público donostiarra en Que me quiten lo bailao (11 al 13 de junio) y la compañía Yllana hará gala de su humor "negro y gamberro" con Star Trip.

Durante este tiempo, en el que habrá teatro infantil y de bosillo, la danza ocupará también un lugar destacado. Habrá muestras de baile africano de la mano de tres compañías de Nigeria, Mali y Mozambique; ejemplos de las tendencias francesas en danza con Les Ballets de la Parenthèse de Marsella; espectáculos de flamenco, con Ángela Cruces, o de fusión de baile y teatro con Marta Carrasco, Premio Coreográfico de la Generalitat de Catalunya 2002.

El programa, que incluye el estreno de la zarzuela Bohemios, de Sasibil, ofrecerá además los conciertos de Petti eta Audience, De Luxe o Maddi Oihenart y Josetxo Goia-Aribe, entre otros.