Polonia mantendrá el mando en Irak hasta fin de año

Polonia no abandonará el mando ni retirará su contingente militar en Irak en el caso de que España decidiera hacerlo como adelantó José Luis Rodríguez Zapatero. "No vamos a presionar al nuevo gobierno", afirma el embajador polaco ante la OTAN, Jerzy Nowak. "Estamos dispuestos a seguir al mando de la fuerza multinacional y a mantener nuestros efectivos hasta por lo menos el 31 de diciembre de 2004", declara el representante polaco, que expresó inquietud por el impacto que el relevo político en España tendrá en el despliegue militar en Irak.

"Sería bastante desafortunado que se produjera una situación de vacío militar en Irak porque la amenaza del terrorismo sigue siendo muy fuerte", dijo el diplomático, quien recalcó, en cualquier caso, que sus palabras no significaban todavía la postura oficial de su país. Sin embargo, el primer ministro polaco, Leszek Miller, confesó ayer que la actitud de Zapatero podría acarrear serias complicaciones para Polonia. Para el embajador Nowak, la fuerza multinacional que dirige su país está "muy bien organizada y es muy compacta". Además, agregó, la salida de España acarrearía también problemas para el futuro del pequeño contingente de tropas de la República Dominicana, El Salvador y Honduras, que se hallan bajo supervisión española. Zapatero afirmó que retirará los 1.300 soldados si antes del 1 de julio no hay resolución de la ONU que respalde su presencia. España tiene el vicemando y se comprometió oficiosamente a relevar a Polonia a partir de esa fecha si para entonces no existe suficiente consenso en la OTAN para que ésta asuma la protección de la zona centro-sur como quiere EE UU. La urgencia norteamericana para que la OTAN se implique en Irak crece día a día, señalan fuentes diplomáticas atlánticas. "La presión empieza a ser insoportable", afirma una de ellas. El representante de Washington ante la OTAN afirmó ayer que facilitará más ayuda logística a España si mantiene sus tropas en Irak.