El PSE desbanca a los populares como segunda fuerza vasca

La prudencia inicial se tornó en alegría casi desbordada en el PSE-EE al conocer anoche los primeros resultados del escrutinio. Los socialistas vascos estaban ayer contentos por partida doble. Los cuatro diputados que consiguieron en las elecciones generales de 2000 se convirtieron en siete, desbancando al Partido Popular vasco de la segunda posición en el País Vasco. Con este resultado en sus bolsillos socialistas, Patxi López, el líder del PSE-EE, se dirigió al lehendakari Ibarretxe, aunque sin nombrarle, para decir: "No se puede hacer ni construir nada en Euskadi sin contar con los socialistas". López dio el banderazo a una nueva etapa en Euskadi: la "etapa del diálogo", que sustituirá "a la etapa de la confrontación", y "la etapa del diálogo", que sustituirá y "enterrará las trincheras" en el País Vasco, en una velada alusión a la etapa del PP de Jaime Mayor Oreja.

Pero todos los ojos de los candidatos y dirigentes del socialismo vasco estaban puestos en la sede central de Ferraz y en el candidato a la presidencia del PSOE. El resultado logrado por José Luis Rodríguez Zapatero, con ese primer escrutinio ( 30%) sobrepasó las mejores expectativas que manejaban los expertos en encuestas del partido, también en Euskadi, ya que daba una victoria clara al PSOE con 165 escaños sobre 138 el PP. Eran las 22 horas.

Los socialistas vascos partían ayer con dos objetivos claros: desbancar al PP de la segunda posición -algo que ya había logrado en votos en los comicios municipales del pasado año, al lograr 251.120 papeletas- y aumentar en número de escaños, que en 2000 sumaban cuatro. "Objetivo más que cumplido", decía ayer un alto responsable socialista. El PSE era la fuerza más votada en Álava, lograban pasar al PP en Vizcaya y convertirse así en la segunda fuerza, tras el PNV, disputándose con esta formación el primer puesto en Guipúzcoa. En total, 336.958 votos.

Desde 1982

El socialismo liderado por Patxi López había conseguido liderar el bloque constitucionalista, desplazando al PP a la segunda posición. El mejor resultado de los socialistas vascos en unas elecciones generales hay que buscarlo en los comicios que llevaron a Felipe González a La Moncloa, en 1982, cuando el PSOE logró en España más de 10 millones de electores. Entonces la participación subió hasta el 79,37% en el País Vasco y los socialistas vascos lograron 348.620 sufragios.

Elvira Kortajarena, número dos en la lista de Guipúzcoa por el PSE-EE, Eduardo Madina, el líder de las juventudes socialista vascas que fue objeto de un atentado de ETA en 2002, y Pilar Unzalu segunda candidata por Álava ocuparán escaño por primera vez.