Llamazares: "Soy tan español como ustedes, señores del PP"

Aún quedan algunas propuestas de Izquierda Unida por desgranar en la recta final de la campaña. Ayer, el coordinador general de la federación de izquierdas, Gaspar Llamazares, lanzó uno de sus últimos cartuchos: IU se compromete, si llega a gobernar, a promover una reforma para incorporar la idea de los presupuestos participativos al Gobierno central y permitir, por ejemplo, que las ONG gestionen el gasto del Estado en ayuda al desarrollo. Llamazares apeló en Córdoba a las esencias de IU y gritó, mostrando su carné de identidad: "Yo soy tan español como ustedes, señores del Partido Popular".

"En un metro cuadrado de este local hay más constitucionalistas que en todo el PP"

Hasta ahora, el mecanismo de participación, que consiste en que la ciudadanía opina sobre cómo debe ser gestionado el presupuesto y ha sido implantado con éxito en Portoalegre (Brasil), funciona sólo en algunos ayuntamientos controlados por IU -Córdoba entre ellos, aunque con moderado tirón popular, de momento- y en algunos del PSOE, como Albacete.

IU cree que se puede extender a los Presupuestos Generales del Estado. Llamazares puso tres ejemplos: que las ONG participen en la gestión del 0,5% del IRPF que se dedica a obra social; que controlen también el 0,7% del PIB dedicado a la cooperación al desarrollo al que IU aspira, y que sean los ecologistas quienes controlen el presupuesto dedicado a Medio Ambiente. "Hay que introducir el presupuesto participativo y la autogestión en el Gobierno central", sostuvo Llamazares, quien recordó que su formación ya ha sometido su programa electoral al "tribunal" de las más importantes organizaciones sociales y ecologistas. Propuso además crear una comisión parlamentaria para seguir el cumplimiento del programa de quien gobierne.

A pesar de coincidir con el partido estrella de la Copa de Europa, el Real Madrid-Bayern Múnich, IU logró reunir a 1.500 personas en un polideportivo de Córdoba, la única capital de provincia que gobierna la federación, utilizada siempre como ejemplo de cómo puede hacer las cosas IU cuando llega al poder. Córdoba, que tiene como candidato para las generales, de nuevo, a Luis Carlos Rejón, es casi un mito en IU. De allí salió su líder durante 12 años, Julio Anguita, que ayer no coincidió con Llamazares en el mitin, algo poco habitual, porque estaba en otro acto en Sevilla. El veterano líder estaba allí el año pasado, en el acto central en Córdoba de las elecciones municipales.

En Córdoba está también la dirigente mejor valorada de IU, la alcaldesa, que siempre aparece en todas las quinielas para las máximas responsabilidades. Rosa Aguilar hizo un discurso apasionado de rechazo del terrorismo doméstico y de defensa de los derechos de la mujer. Recordó que en su ayuntamiento, tras cada muerte de una mujer a manos de su pareja, se guardan dos minutos de silencio igual que tras los atentados de ETA.

Aguilar también criticó al PP por utilizar la Constitución en beneficio propio, porque cuando se aprobó "ellos no estaban". Tuvo mucho éxito en todo su discurso, como casi siempre, pero fue especialmente aplaudida cuando recordó la historia del PCE y cuando se dirigió al secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, para recordarle que "si hay mayoría de izquierdas" la gente le va a exigir que el Gobierno sea de izquierdas.

Llamazares hizo un discurso dirigido a las esencias de la izquierda. Marcó referencias constantes a la república, y pidió a Mariano Rajoy que, si quiere diferenciarse de José María Aznar, condene el franquismo y "reconozca la legitimidad de la II República". Exhibiendo el carné de identidad ante el público, gritó: "Yo soy tan español como ustedes, señores del PP, pero nosotros no creemos en la patria como un territorio, sino en un lugar con ciudadanos que tienen derechos, donde hay justicia social y diálogo". También reivindicó, como hizo en la campaña de las municipales de 2003, el pasado democrático del PCE: "Tan solo en un metro cuadrado de este local hay más constitucionalistas que en todo el Partido Popular".

Llamazares lee cada día un mensaje que les mandan los jóvenes de Izquierda Unida para demostrar la precariedad laboral. Ayer explicó el caso de una joven que ha tenido 19 contratos distintos en tres meses. La mayoría de ellos de tres, cuatro o cinco días. "Vamos a acabar con eso, el 50% de estos contratos son ilegales. No podemos permitirlo. Necesitamos los votos de los jóvenes para acabar con este sistema", clamó el candidato.

Diego Valderas, el candidato de la federación para la Junta de Andalucía, endureció aún más, como antes Luis Carlos Rejón, el discurso contra los socialistas. En Andalucía, la crítica de IU al poder se transforma también en rechazo al PSOE, que controla la comunidad desde hace 22 años. Valderas, que en cada mitin da la sensación de estar al borde del ahogo por el cansancio de voz que arrastra, criticó el "doble lenguaje" de los socialistas, y sostuvo que "la izquierda no es izquierda si no es capaz de acabar con la pobreza y la exclusión". Eso es algo que, según destacó, los socialistas no han logrado apenas mejorar".