PÍLDORAS

'Piercing' en la oreja

El riesgo de infecciones de un piercing en la oreja depende, entre otros factores, del lugar exacto donde se coloque. Los piercings en el cartílago son más peligrosos que los realizados en el lóbulo de la oreja, según un estudio publicado en el último número del Journal of the American Medical Association, que ha indagado en las razones de la proliferación de infecciones por la bacteria Pseudomona aeruginosa entre los portadores de piercings. El estudio, realizado con 118 personas que llevaban 186 piercings, constató siete casos confirmados de infección por esta bacteria y otras 18 sospechas de infección.

Insuficiencia venosa

La obesidad, la edad y el desempeño de profesiones que supongan una larga permanencia de tiempo de pie, sentado o con exposición prolongada al calor son importantes factores de riesgo de la llamada insuficiencia venosa crónica. Este proceso vascular periférico, que consiste en una disfunción del sistema venoso de las extremidades inferiores, provoca hinchazón, sensación de calor, dolor, molestias, pesadez, cansancio y calambres. Un estudio de la Sociedad Española de Angiología y Cirugía Vascular advierte de que estos síntomas y signos cuando aparecen con frecuencia deben sugerir la consulta al médico, pues a menudo se atribuye su aparición "al cansancio y a cosas de la edad", que conducen a una situación crónica y no diagnosticada. Estos trastornos pueden complicarse seriamente con flebitis, trombosis venosa profunda y úlceras.- M. S.

El sida en Europa

El sida se está propagando con rapidez en Europa oriental y está aumentando de nuevo en Europa occidental, debido a que en muchos lugares se carece de programas integrados de prevención y tratamiento o, donde existen, no se han mantenido, según la OMS. En los países de Europa oriental la epidemia está propagándose a una velocidad sin precedentes en el mundo. En Europa occidental y en Asia central más de 1,5 millones de personas son seropositivas, frente a las 30.000 de 1995.

Vacuna de la tos ferina

La tos ferina no termina de erradicarse en las sociedades industrializadas. Entre 2000 y 2002 se han declarado 1.641 casos en España, sin tener en cuenta los no informados. Los niños pierden la inmunidad frente a esta enfermedad con el paso del tiempo, pero hasta hace muy poco no se disponía de una vacuna para mayores de seis años o adultos. La tos ferina no suele ocasionar problemas en los niños vacunados o en los adultos que la sufren; el problema radica cuando éstos se la contagian a los lactantes, que no están vacunados y en los que puede ocasionar graves trastornos. "En el calendario vacunal que se publicará en la revista Anales de Pediatría el próximo mes de mayo, los expertos recomiendan que en los preadolescentes, de entre los 13 y 16 años, se administre como primera opción, y en lugar de la vacuna tradicional (difteria y tétanos), la de la difteria, tétanos y tos ferina de adulto", indica Francisco Jiménez Sánchez, secretario del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría.- C. G.