Sorpresa con retraso
Va a hacer tres años que mi padre falleció repentinamente sin hacer testamento. Como una de mis hermanas es abogada y, afortunadamente, mi madre continúa con nosotras, comentó de la conveniencia de que ella (nuestra madre) sí testara, para que en el futuro no tuviéramos problemas con ningún organismo público del país.
Hasta aquí, todo normal, pero cuál ha sido nuestra sorpresa que tanto mis hermanas como mi madre hemos recibido sendas cartas por parte del Excelentísimo Ayuntamiento de Madrid reclamándonos un impuesto (sobre el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana por transmisión mortis causa).
Nos quedamos de piedra por varios motivos. Primero, ¿por qué esperan todos estos años para reclamar ese impuesto? Pues no les digo lo que nos piden ahora, alegando que deberíamos haberlo pagado hace tres años (con el consiguiente recargazo). Les preguntamos, y la malhumorada funcionaria de turno nos contesta que es algo que deberíamos saber (¿acaso debemos saber todos los madrileños los reglamentos del municipio?). Mi hermana, que es abogada, no tenía ni idea.
En segundo lugar, continuamos leyendo la notificación y nos damos cuenta de que, de haberlo pagado al principio, podíamos habernos beneficiado de una bonificación de hasta el 95% del impuesto... Como que me huele muy, pero que muy mal.
Qué casualidad que remiten la carta antes de que pasen cuatro años (para que no prescriba) y no les cuento que, al preguntarles si podíamos pagarlo en dos o tres veces, nos contestan que las modalidades de pago son al contado o aplazado en un año (con un interés de 4,75%).
En fin, que estamos muy contentas de cómo funciona nuestro querido Ayuntamiento de Madrid. Sólo nos queda avisar a todas aquellas personas que se puedan encontrar en nuestra situación para que estén alerta.
Por cierto, al preguntarles qué hubiese ocurrido si no nos hubieran localizado, su respuesta fue: "Lo hubiéramos notificado en el Boletín Oficial del Ayuntamiento de Madrid". Así que, ya saben, léanse también todos los días el boletín..., por si acaso.
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