Aznar asegura que el consenso sobre el PHN es "casi completo"

El presidente del Gobierno, José María Aznar, defendió ayer la validez del Plan Hidrológico Nacional (PHN) durante el acto de colocación de una primera piedra de este proyecto en la Comunidad Valenciana, después de que la Junta Electoral, en disparidad de criterios, permitiera este acto en Villena (Vinalopó Mitjà) y suspendiera otro similar en Vinaròs.

Aznar afirmó: "Éste es el mejor de todos los planes hidrológicos nacionales; primero porque es el que técnicamente más se ha elaborado; segundo porque es el que más consenso ha tenido, un consenso casi completo; y tercero porque es el que se está ejecutando". El presidente del Gobierno ignoró así las dudas que mantiene la Unión Europea (UE) sobre el trasvase y las discrepancias de

las comunidades de Cataluña y Aragón y de los colectivos ecologistas.

El presidente del Gobierno fue rotundo y afirmó que este plan "beneficia a todos y no perjudica a nadie", a la vez que destacó la importancia de la preservación medioambiental que se ha tenido en cuenta para su desarrollo.

Aznar explicó que el proyecto cuenta con importantes apoyos sociales, logrados por su protección al medio ambiente, "como demuestra el hecho de que la UE haya decidido financiar el 35% del trasvase Júcar-Vinalopó; o lo que es lo mismo, que haya concedido 80 millones de euros para dar de beber a 600.000 personas".

En este sentido se expresó la ministra de Medio Ambiente, Elvira Rodríguez, quien afirmó que las ayudas al trasvase Júcar-Vinalopó son un ejemplo de lo que ocurrirá con el trasvase del Ebro. Según Rodríguez, "el PHN ya ha pasado el primer trámite ante el Comisario de Desarrollo porque cumple el requisito de ser un proyecto de cohesión" y "antes de verano recibirá el ok definitivo".

La primera piedra que colocó Aznar corresponde al tramo 31 del trasvase del Ebro, entre las provincias de Valencia y Alicante que atravesará los municipios de Font de la Figuera, Fontanars dels Alforins y Villena. Se trata de unas obras valoradas en más de 67,5 millones de euros para construir el túnel más largo de todo el proyecto del trasvase. Unos 12.180 metros metros de canalización estarán bajo tierra para salvar el paraje natural de la Serra dels Alforins; otros 280 metros discurrirán en "falso túnel" y 471 metros se construirán a cielo abierto. Esta infraestructura transportará un caudal de unos 45 metros cúbicos por segundo.

La ministra explicó que el proyecto asegurará el agua necesaria para la superficie de cultivos actuales y rechazó la idea de que el sector turístico excluya en el futuro a los agricultores en el reparto de suministro de agua procedente del Ebro.

Por su parte, el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, calificó el fasto de ayer de "día histórico", por el cumplimiento de una importante reivindicación de la sociedad valenciana. El presidente de la Junta Central de Usuarios del Vinalopó, Andrés Martínez, incidió en la necesidad de agua de la provincia de Alicante para atajar el problema de la sequía. "En los últimos cinco años se ha producido la pérdida de 12.000 hectáreas de cultivo de regadío por la falta de agua", recalcó.

Los más de 900 kilómetros de canalizaciones que transportarán agua del Ebro a Almería están presupuestado en más de 4.200 millones de euros. Según el proyecto, el 44% de la canalización transcurrirá por la Comunidad Valenciana.