_
_
_
_
ELECCIONES EN IRÁN

Las minorías religiosas acusan al Gobierno de discriminación

Jorge Marirrodriga

Con 350.000 adeptos en Irán, los bahaís, seguidores de un credo monoteísta que recoge aspectos del islamismo, el cristianismo y otras religiones orientales, son el segundo mayor grupo religioso del país. Acusados por el régimen de Teherán de herejes y espías, denuncian la violación de los derechos humanos en Irán, aunque sus representantes reconocen que las situaciones más graves mejoraron tras la llegada al poder en 1997 del actual presidente, Mohamed Jatamí.

"Se han dado algunos pasos, por ejemplo el Parlamento se ha adherido a convenciones contra la tortura o la discriminación de las mujeres, pero luego estas decisiones han sido bloqueadas", señala Nazila Ghanea, seguidora de esta religión y profesora de Derechos Humanos en la Universidad de Londres, autora de un informe sobre el papel de Naciones Unidas en el respeto a esta minoría religiosa en Irán.

Más información
Los colegios electorales cierran en Irán con los resultados pendientes de la tasa de abstención
Los conservadores obtienen la mayoría absoluta en el Parlamento iraní

Surgido a finales del siglo XIX en Irán, el bahaísmo se extendió por el territorio del Imperio Otomano. A ello responde el que, por ejemplo, una de sus principales sedes esté en Haifa, Israel, por lo cual los bahaís iraníes son frecuentemente acusados de espías. "La historia nos sobrepasó", apunta Ghanea, quien en su informe denuncia que aunque bajo el actual régimen iraní se experimenta una cierta tolerancia en el ámbito político, persisten numerosas excepciones en cuanto a los derechos humanos. Según Ghanea, los bahaís pueden ser expulsados de las universidades o perder sus empleos aplicando instrucciones supervisadas personalmente por el líder espiritual del país, Alí Jamanei. "Nunca hemos pedido ningún tipo de autonomía territorial o autodeterminación. Lo que exigimos es que el respeto a los derechos humanos se extienda a todos los ciudadanos", subraya la profesora.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Jorge Marirrodriga
Doctor en Comunicación por la Universidad San Pablo CEU y licenciado en Periodismo por la Universidad de Navarra. Tras ejercer en Italia y Bélgica en 1996 se incorporó a EL PAÍS. Ha sido enviado especial a Kosovo, Gaza, Irak y Afganistán. Entre 2004 y 2008 fue corresponsal en Buenos Aires. Desde 2014 es editorialista especializado internacional.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_