Un enero con menos víctimas

El 27 de enero, un martes cualquiera del año, 14 personas se dejaron la vida en las carreteras. Fue el día más trágico en el recuento de víctimas del mes pasado, que terminó con 275 personas muertas. En el mismo periodo de 2003, los fallecidos fueron 303, un 9,2% más. El número de los accidentes mortales fue también menor: 270 hace un año y 245 en éste, es decir, un 9,3% menos. ¿Razón para ser optimistas o simple casualidad?

Para comparar los registros históricos de accidentes de tráfico hay que tener en cuenta múltiples variables, que van desde el estado de las vías o las condiciones meteorológicas hasta la edad media de los automóviles. Pero un primer estudio de las estadísticas del primer mes de 2003 con el mismo periodo de 2004 ofrece un dato preocupante: durante los fines de semana hubo un 14% más de víctimas mortales que en los de enero del año pasado.

Los jóvenes conductores, cuya presencia en las carreteras es mayor los fines de semana, siguen siendo el grupo de mayor mortalidad. El 31,8% de los muertos en accidentes durante el mes de enero tenía menos de 30 años. Desde el primer día del año está en vigor la reforma de la Ley de Seguridad Vial que castiga con más dureza las infracciones. En la Dirección General de Tráfico (DGT) opinan, sin embargo, que todavía es muy pronto para evaluar la eficacia de las reformas en la reducción de la siniestralidad en las carreteras.

FALLECIDOS Los fines de semana, más

Durante enero de este año, sólo en tres de los 14 viernes, sábados y domingos del mes no se alcanzaron los diez o más muertos en carretera. El año anterior ocurrió lo contrario: únicamente en tres días se pasó de esta cifra. A 31 de enero pasado, viernes, 141 personas habían muerto durante los fines de semana, 15 más si se incluye en el cálculo a los fallecidos los días de Año Nuevo y Reyes. De hecho, el año se estrenó trágicamente: tres de los cinco miembros de una familia murieron el 1 de enero en un choque frontal en Valdemorillo (Madrid). Cuando terminó el mes, 18 personas habían muerto en las carreteras de la Comunidad de Madrid.

Los 245 accidentes con víctimas mortales durante el mes pasado también causaron heridas graves a 130 personas en todo el país. En el recuento diario de los accidentados heridos se aprecia también un incremento de las cifras durante los fines de semana: más de la mitad de los más graves (68) lo fueron entre el viernes y el domingo.

EDAD DE LAS VÍCTIMAS Los jóvenes son mayoría

¿Víctimas o responsables? Los jóvenes son, como viene siendo habitual, el grupo de edad con el mayor número de víctimas mortales: 78 personas menores de 30 años perdieron la vida el mes pasado. Un estudio realizado por el RACC Automóvil Club y publicado a principios de este año revela que el 60% de los conductores menores de 24 años ha sufrido algún tipo de accidente desde 2002. La mayoría de los jóvenes fallecidos en las carreteras el mes pasado tenía más de 20 años, pero 14 de ellos no superaban los 18. Dos de estos adolescentes murieron el 22 de enero cuando el deportivo en el que viajaban se salió de la calzada dando tres vueltas de campana en una autopista murciana.

Además, muchos de los heridos graves que sufrirán daños cerebrales irreversibles como consecuencia de estos accidentes son jóvenes. Según datos de la Federación Española del Daño Cerebral, el 75% de los que sufren esta minusvalía la adquirieron tras un choque en la carretera.

Pero los jóvenes no sólo sufren las consecuencias de los siniestros. Muchos también los provocan: 60 menores de 30 años figuran en la lista de presuntos conductores responsables de los siniestros. Los conductores presuntos responsables de edades comprendidas entre los 31 y 60 años fueron 95, mientras que 31 superaban esa edad.

DISTRIBUCIÓN REGIONAL En las más pobladas

Cataluña y Andalucía son las comunidades autónomas donde más personas han muerto en carretera: 36 en cada una. En enero de 2003, Cataluña también registró el índice más alto de víctimas mortales (47), seguida de la Comunidad Valenciana (42) y Andalucía (41). Las cifras de fallecidos han descendido en las tres comunidades, pero es en la zona del este mediterráneo donde la disminución es más notable: 12 víctimas mortales menos que hace un año.

En el otro extremo de la lista se encuentran comunidades uniprovinciales como Cantabria y Asturias con cuatro muertos en sus carreteras. En cambio, el País Vasco, mucho más poblado, presenta también una cifra baja, cinco muertos.

El estudio de las cifras de siniestralidad desglosadas por provincias muestra que es en las zonas más pobladas donde el riesgo es mayor. Los registros son elocuentes: Madrid (18 muertos), Sevilla (14), Barcelona y Valencia (13), son las provincias donde más personas han fallecido. En la de Palencia, por el otro lado, no se produjo un sólo accidente mortal en ese periodo.

El número de kilómetros de vías de gran capacidad, autovías y autopistas de los que goza cada comunidad autónoma es un factor importante a tener en cuenta para fijar la radiografía de los accidentes del mes pasado. La inmensa mayoría de los siniestros y de los fallecidos (206, el 75% del total) se produjeron en vías convencionales, de doble sentido circulatorio, algo que confirma la tendencia de los últimos años y los datos de enero de 2003. Los muertos en este tipo de carreteras fueron 242 (79%). Las autopistas y autovías siguen el recuento, a mucha distancia, con 30 y 26 víctimas mortales, respectivamente, durante el primer mes de este año. Las vías de circulación desdoblada son, por tanto, más seguras, aunque representan menos del 10% de la longitud total de las carreteras españolas, 163.000 kilómetros.

TIPOS DE ACCIDENTES Colisiones y salidas de vía

Los vehículos que se salen de la vía por la que circulan y las colisiones en sus distintas modalidades representan las dos terceras partes de los accidentes mortales contabilizados en enero. Un accidente característico de esta tipología ocurrió el día 10 en la A-7 a la altura de Picassent (Valencia). Tres personas murieron y dos resultaron heridas graves al saltar su vehículo la mediana de la autopista y chocar brutalmente contra un camión cisterna que circulaba en el sentido contrario.

Los atropellos de peatones en carretera son otro tipo común de accidente. El pasado día 27 de enero, un trabajador de mantenimiento de la A-8, murió arrollado por un turismo a la altura de Eibar (Guipúzcoa). Al terminar el mes, 29 peatones habían muerto en los arcenes.

Los atropellos más comunes ocurren cuando los conductores o acompañantes descienden de un vehículo por avería o para auxiliar a otro conductor en apuros. Para reducir el riesgo implícito de estas situaciones, la reforma del Reglamento de Circulación hará obligatorio para todos los usuarios de las vías, desde el próximo 23 de julio, el uso de chalecos reflectantes cuando los ocupantes de un vehículo deban apearse en carretera.

LAS CAUSAS Velocidad y distracciones

Las causas de los accidentes son muy variadas, desde factores externos al conductor o el vehículo, como el clima, hasta el estado de salud del piloto

. Pero son la distracción del conductor, en 69 casos del mes pasado, y la velocidad inadecuada, en 60 ocasiones, los causantes principales de los siniestros mortales registrados.

Una maniobra antirreglamentaria en 29 accidentes, la irrupción de peatones en la calzada (24) y la invasión del vehículo del carril contrario (13) siguen en importancia a las distracciones y al exceso de velocidad. La falta de descanso del conductor y la somnolencia que produce, estuvo en el origen de seis de los choques mortales de enero. Sin embargo, la mayoría de los accidentes mortales se produjeron de las 14.00 a las 20.00: 85 siniestros con 94 víctimas. Desde medianoche y hasta las siete de la mañana, el número de fallecidos fue menor: 53 muertos en 47 accidentes.

El alcohol y las drogas son, como es sabido, malos acompañantes del conductor: según un estudio de la DGT, la mitad de los accidentes tienen su origen en el abuso de estas sustancias.