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El 60% de los pisos de la reforma de Vall d'Hebron serán obra pública

Uno de los mayores proyectos urbaniísicos del 22@ ya tiene su aprobación definitiva

El conjunto de las viviendas del Vall d'Hebron crecerá en unas 1.200 unidades a causa del plan de mejora de varios de sus barrios: La Taxonera, La Clota, Font Baliarda y los alrededores de la avenida del Estatut. Esas nuevas viviendas serán mayoritariamente públicas: el 60% de los pisos serán de protección y una parte importante, de alquiler. La comisión de gobierno del Ayuntamiento de Barcelona dio el visto bueno inicial a esa modificación del Plan General Metropolitano.

En realidad, lo aprobado inicialmente ayer es parte del plan director que el consistorio intentó sacar adelante el mandato pasado. No lo consiguió por la oposición vecinal, en especial al traslado del mercado de los Encants frente a la residencia del Vall d'Hebron. Ahora, pese a que no hay un acuerdo total, la concejal del distrito, Elsa Blasco (ICV), ha conseguido llegar a acuerdos con los afectados y los vecinos de la zona en las líneas generales de la reforma. Éstas son las siguientes: unas 1.200 viviendas nuevas más- cerca de 300 para los afectados que deben ser realojados-, 34.000 metros cuadrados de techo para actividad económica del sector servicios y oficinas, zona verde no cuantificada y equipamientos que se determinarán más adelante.

La principal novedad es que de los 114.000 metros cuadrados de techo nuevo de viviendas, 56.000 serán de protección, 10.000 más en régimen de alquiler también protegido y 48.000 metros cuadrados para el mercado libre. "Queremos crear una nueva trama urbana para unir barrios sin perjudicar una área que proteger, como lo es Collserola", explicó la concejal. La modificación no hace mención alguna al túnel de Horta, defendido por el anterior Gobierno catalán y con posturas no del todo definidas por parte del tripartito del Ayuntamiento.

Un total de 273 viviendas afectadas serán sustituidas por otras nuevas en el mismo entorno. La zona más afectada es la Font del Gos, donde desaparecerán 185 viviendas levantadas en suelo forestal dentro de la reserva de Collserola. Lo que se propone es un nuevo barrio, junto a la carretera de las Roquetes, junto a la Ronda. En esa zona también se creará un nuevo espacio público y equipamientos. En el barrio de la Taxonera desaparecerán cerca de una cincuentena de viviendas y las nuevas se situarán más cerca del paseo del Vall d'Hebron. La Clota es otro barrio que cambiará: se propone la creación de un gran espacio público y situar las edificaciones junto a la avenida del Estatut. La actividad terciaria que se ganará en ese punto se colocará sobre edificios de equipamientos. El plan pretende que todos los barrios tengan espacios, parques y plazas practicables. También sitúa el nuevo mercado municipal en el emplazamiento conocido como la llosa, justo frente a la residencia del Vall d'Hebron, prolonga la pista de la carretera de las Aigües y propone modificaciones viarias dentro de los barrios del lado montaña de la Ronda de Dalt para mejorar su conexión. También propone la prolongación del paseo de Valldaura.

La comisión de gobierno también aprobó ayer el último plan especial definitivo del 22@ de Poblenou, bautizado como Llull-Pujades (Ponent), que abarca 318.160 metros cuadrados de superficie, equivalente a 18 manzanas del Ensanche, a ambos lados de la calle de Pujades, entre Joan d'Àustria y Roc Boronat, así como tres manzanas entre las calles de Llull, Ramon Turró, Ávila y Roc Boronat. De las 1.290 viviendas existentes en esa gran área, el 97% -1.250- se conservarán, mientras que se construirán 263 pisos nuevos, todos de protección. El número final de pisos, 1.534, será un 19% superior al actual. Asimismo, se crearán 8.765 metros cuadrados de suelo para equipamientos, la mayoría concentrados en la manzana delimitada por Ramon Turró, Badajoz y Ciutat de Granada. En cuanto a las zonas verdes, aumentarán en 9.439 metros cuadrados y alcanzarán los 10.725 metros cuadrados. Finalmente, de los 304.104 metros cuadrados de actividad económica que hay en la zona, el 84% se conservará y se añadirán otros 236.662. Como complemento a este plan y también en la zona del 22@, el Ayuntamiento aprobó el proyecto de infraestructuras del tramo de la calle de Ávila entre las de Doctor Trueta y la avenida de Icària, valorado en 793.410 euros, y el de dos tramos de la calle Sancho de Ávila, con un coste de 2,5 millones de euros. Ambas actuaciones, que suponen soterrar las infraestructuras actuales y dotar a la zona de otras nuevas relacionadas con las nuevas tecnologías, comenzarán a ejecutarse en un plazo de dos años.

Ramon Massaguer, nuevo gerente de Urbanismo

La salida de Josep Anton Acebillo como arquitecto jefe del Ayuntamiento de Barcelona y el fichaje por parte del Gobierno catalán de Ramón García Bragado, gerente de Urbanismo en el último mandato de Joan Clos y renovado al inicio del actual, ha desencadenado una reorganización del área de Urbanismo. Se trata de una de las más sensibles, con proyectos todavía por concluir, como el Fòrum, y algunas intervenciones de importancia en puertas. El consistorio ha situado al frente de la gerencia a Ramon Massaguer, que desde 1998 ocupó el cargo de secretario general del Departamento de Sanidad y Seguridad Social. Es una persona con una amplia experiencia en la administración pública, más en el ámbito de la sanidad, aunque también en el del urbanismo.

En medios profesionales relacionados con la arquitectura se vincula a Massaguer al primer teniente de alcalde, Xavier Casas, y al propio alcalde, Joan Clos. De hecho, los tres han intervenido en algunos procesos, como la creación de algunos organismos integrados por el Ayuntamiento y la Generalitat. Algunos de ellos son el Consorcio Sanitario de Barcelona, la Agencia de la Salud Pública y el Instituto Municipal de Asistencia Sanitaria.

Massaguer trabajó estrechamente con el Ayuntamiento en todo el proceso urbanístico de construcción de los centros de asistencia primaria de Barcelona y ha sido miembro de la Comisión de Urbanismo de Cataluña durante 10 años. Su perfil es de gestor, uno de los que más abundan en el Ayuntamiento que encabeza Clos.

Massaguer compareció ayer por primera vez en un acto público, junto a Ferran Mascarell, portavoz del gobierno municipal, para informar de los acuerdos tomados en la comisión de gobierno.

En sectores profesionales de la arquitectura se está un poco a la expectativa sobre el talante y las prioridades de Massaguer, que, entre otras cosas, deberá recomponer parte del organigrama del área y los servicios de urbanismo. Asimismo se hacen conjeturas sobre el rumbo que tomará la gerencia de Urbanismo después de una época -la del mandato anterior- en la que había plena sintonía entre Acebillo, el entonces gerente y parte del equipo, puesto que todos habían trabajado en Barcelona Regional, la empresa municipal de estudios y proyectos viarios y ferroviarios.

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