_
_
_
_
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Efemérides de una irresponsabilidad

"Para llegar a un acuerdo de venta, como el que suscribió el director de adquisiciones de NAMSA el 4 de febrero de 2002 con el general jefe del Estado Mayor Conjunto, general Ibarreta, había sido necesario seguir un procedimiento de contratación... Es España quien inicia el expediente, tras aprobar internamente el pliego de prescripciones técnicas y decidir que se lleve adelante a través de NAMSA" (Diario de Sesiones del Congreso de los Diputados, Comisión de Defensa, Sesión núm. 40, página 24474).

Ésta fue parte de la explicación que el señor ministro de Defensa dio el 4 de junio pasado respecto al procedimiento de contratación de aviones para transportar a nuestros militares a Afganistán. Pero con anterioridad, inmediatamente después del accidente del 26 de mayo, en el que perdieron la vida 62 militares, el ministro había dicho a los medios de prensa: este tipo de aviones son "excelentes", tienen "plena garantía" y que son revisadas "por la propia Alianza Atlántica". Más tarde, el 30 de mayo, podíamos leer en el Abc: "El secretario general de la OTAN, Robertson, afirmó que el papel de la NAMSA es de mero intermediario entre contratantes y demandantes"; y en EL PAÍS se decía: "La OTAN se limita a comprobar la documentación en regla y los seguros de los pasajeros cumplimentados".

Ese mismo día declaró el señor ministro que el EMAD elabora ya un informe para esclarecer "con toda nitidez" cuáles son los papeles de la agencia de la OTAN y del Ministerio de Defensa en la contratación de aviones de transporte estratégico.

Así de triste ha sido, el Ministerio de Defensa se ha interesado sólo por "preocuparse" qué tipo de contrato había suscrito, qué responsabilidades había adquirido y cuáles había enajenado con posterioridad al accidente. Fue necesaria la muerte de 62 militares en un accidente aéreo para "preocuparse" de quiénes eran las responsabilidades, y digo "preocuparse", porque, aún, hoy en día, no sabemos nada respeto a la imputación y atribución de responsabilidades.

¿Cuántos contratos realiza el ministerio sin conocer lo que contrata? ¿Si no hubiese habido el trágico accidente nuestros militares seguirían volando en un transporte contratado por unos mandos que desconocían qué habían contratado?

Tanta diligencia para castigar bajo disciplina militar a un sargento, a un cabo, a un soldado merecidamente por una negligencia, pero los altos mandos están vacunados, son inmunes a los castigos, a pesar de sus probadas negligencias. Pero en España no aprenderemos ni de nuestros errores porque no tenemos ni la humildad para reconocerlos, ni la dignidad para asumir sus consecuencias.

Estamos vendidos a la prepotencia, a la altanería, a la arrogancia, a la ignorancia, a la irresponsabilidad presentes en muchos días del calendario, pero inconscientes para sus ejecutores.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_