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Una nueva avería eléctrica del metro deja sin servicio a miles de usuarios

Varios miles de usuarios se vieron afectados ayer por una avería eléctrica en el metro de Bilbao, que quedó totalmente paralizado en la tarde de ayer durante una hora. La avería afectó especialmente a la línea de la Margen Izquierda, que permaneció más de cuatro horas y media sin el servicio normalizado.

Todo se debió a un fallo en la catenaria en la estación de Ansio (en Barakaldo), la línea que proporciona la energía a este transporte para su funcionamiento. Los responsables del suburbano lograron restablecer tras una hora la circulación en la línea 1, que une la capital con la Margen Derecha, pero la 2, a la Margen Izquierda, estuvo parada hora y media y durante el resto de la jornada funcionó parcialmente: se utilizó sólo una de las dos vías y las frecuencias se redujeron a 20 minutos de los cinco o diez minutos. El problema se produjo además en plena hora punta cuando miles de personas salían de sus puestos de trabajo.

El director gerente adjunto de Metro Bilbao, José Enrique Urkijo, explicó que la avería se produjo hacia las 17.30 al soltarse un aislador ubicado en la catenaria a la altura de la estación de Ansio, según las primeras averiguaciones. Tras el paso de dos unidades, el fallo causó la pérdida del fluido eléctrico y la paralización de ambos convoyes en la vía.

Los responsables del metro decidieron interrumpir el tráfico en las dos líneas hasta localizar el problema. Primero se retiró una de las unidades, parada en la estación de San Inazio, lo que permitió dotar de energía a la línea 1, que une Bolueta con Plentzia, hacia las 18.30.

Segunda avería en dos días

Urkijo agregó que media hora después se empezó a restablecer el servicio en la línea de la Margen Izquierda, aunque en este caso los trenes circularon sólo por una vía y con frecuencias de 20 minutos, que se mantuvieron hasta el final de la jornada. La Diputación anunció que reforzaría el servicio de autobuses a la Margen Izquierda para mitigar las molestias a los clientes asiduos del suburbano.

Para los primeros servicios del metro de hoy se esperaba que las frecuencias de paso volvieran a ser las habituales.

Los problemas de ayer se suman a los retrasos sufridos el lunes por miles de usuarios por problemas en el suministro eléctrico, un fallo que Urkijo señaló no tenía ninguna relación. Entonces las incidencias se prolongaron durante dos horas, pero no paralizaron la línea: los trenes estuvieron detenidos varios minutos en las estaciones y algunas unidades circularon a trompicones. Las demoras no superaron, en muchos casos, los diez minutos de espera, pero hubo aglomeraciones al tratarse de una hora punta, entre las 13.30 y las 15.30.

En las últimas semanas ya se han registrado otros problemas con el fluido eléctrico del suburbano y los pasajeros han notado problemas en la marcha de los convoyes y bajadas en la intensidad de la luz interior de los trenes.

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