De lujo por las aguas del mar Caribe

Estará en unos de los pocos terrenos que todavía quedan por explotar en Punta Cana, el primer destino turístico de República Dominicana, con casi un millón de visitantes anuales. Tendrá 120 millones de metros cuadrados bañados por 8,5 kilómetros de las playas vírgenes del Mar Caribe, de los que sólo un 10% van a ser construidos para conformar Cap Cana, un complejo que quiere convertirse en el referente turístico por excelencia del país y en el que Grupo Abrisa va a invertir 1.200 millones de euros hasta 2010.

A lo grande, todo a lo grande. Así es como quieren que sea Cap Cana que tendrá la marina más grande de todo el Caribe, con 1.200 amarres, la mayoría de ellos para embarcaciones de gran eslora; más de 2.000 apartamentos, casas y chalés, y otras tantas habitaciones de hotel con las que atender al turismo de mayor calidad de la isla. Porque es al cliente de élite al que piensa dirigirse este nuevo destino turístico, que durante este año empezará a dar sus primeros frutos.

Las más de 2.000 propiedades inmobiliarias del macroproyecto dominicano tienen un precio de salida de 381.000 euros

Para verlo terminado, el conglomerado dominicano Grupo Abrisa, tiene previstas unas inversiones de más de 1.270 millones de euros hasta 2010 a través de su filial Cap Cana, así como unos ingresos de 1.780 millones de euros mediante la venta de propiedades inmobiliarias.

Todo empezó hace casi tres años, cuando la familia Hazoury, propietaria del grupo, adquirió estos terrenos de la localidad de Juanillo, donde por entonces sólo unas 30 familias okupas poblaban la zona. Los Hazoury pagaron una cuarta parte del valor en que está tasado hoy este suelo virgen (254 millones de euros, según Ricardo Hazoury, presidente de Cap Cana), negociaron con los habitantes de las viejas casas su traslado a un pequeño pueblo construido para ese fin -que en 10 años se espera tenga 20.000 habitantes- y se pusieron manos a la obra.

Diseñaron un "master plan" en el que se planificó paso a paso el desarrollo por fases y por volumen de inversión de este macroproyecto, se acogieron a una nueva ley dominicana por la que las empresas que impulsen zonas de escaso desarrollo quedan exoneradas del pago de impuestos durante 10 años y empezaron a contratar a compañías que dieran lustre a Cap Cana, cuyo objetivo es el de convertirse en el primer referente turístico de Punta Cana, que recibe cerca de un millón de visitantes al año, la tercera parte de los que llegan a República Dominicana por vía aérea.

La primera de las empresas que participan en el desarrollo del proyecto es la norteamericana IMI Resort Holdings, encargada del márketing y del original sistema de ventas que se ha puesto en marcha, con el que Cap Cana ya ha ingresado unos 170 millones de euros entre 2002 y 2003.

Aunque lo mejor llegó después, con la entrada de una de las figuras del golf de todos los tiempos: Jack Niklaus, que se encargará de diseñar al menos tres de los seis campos de que dispondrá el complejo turístico, así como del primer hotel que se comercializará con su nombre en el mundo.

Hasta ahora se han invertido del orden de 102 millones de euros, de los cuales 61 han sido aportados por los socios fundadores del complejo y el resto ha sido obtenido mediante financiación bancaria, según el director financiero de la compañía, Michel Domínguez, que explica que en República Dominicana sólo se puede conseguir el 20% de la inversión prevista para un proyecto a través de la banca. De ahí que la empresa se proponga ahora una nueva vía de financiación: el mercado bursátil.

Salida a Bolsa

"En enero o febrero sacaremos a la Bolsa nacional cerca de 85 millones de euros del capital de Cap Cana, porque el mercado local se nos ha quedado pequeño con la devaluación de la moneda y tenemos que recurrir al internacional para obtener financiación", señala Domínguez. Y los clientes objetivos están mayoritariamente en Estados Unidos, país que se prevé ocupe el 65% de las propiedades del proyecto, en tanto que el resto se repartirá entre compradores dominicanos y europeos.

Este año, el macrocomplejo empezará a ser una realidad. Antes de que acabe 2004 está previsto que se inauguren el primer campo de golf y el hotel impulsados por el golfista Jack Niklaus. Éste último formado por 64 villas de entre 100 y 300 metros cuadrados, es decir, las suites que conformarán todos los establecimientos de lujo que se van a instalar en Cap Cana y que tendrán un precio diario de entre 339 y 1.695 euros; así como los 60 apartamentos comprados por los socios fundadores y 175 amarres de la marina.

Las propiedades de Cap Cana se venden desde 381.000 euros.