Interior crea un grupo para estudiar medidas legislativas contra el consumo de 'cannabis'
El Ministerio del Interior y el Plan Nacional sobre Drogas (PND) constituyeron ayer un grupo para estudiar las medidas destinadas a combatir el consumo de cannabis, la droga ilegal de mayor consumo en España, afirmó el titular de Interior, Ángel Acebes. El grupo se centrará en iniciativas de tipo "educativas, sanitarias y preventivas (legales)", indicó el ministro, aunque serán estas últimas las que primarán, según se desprende de su composición: de los 16 expertos, siete están especializados en derecho (entre ellos tres fiscales) y dos son del Plan sobre drogas, que depende de Interior. El resto son cinco médicos, psicólogos o farmacéuticos, y dos representantes de asociaciones de lucha contra la drogadicción.
Acebes aportó numerosas cifras que justificaban la especial preocupación en la extensión del consumo del cannabis. El 17% de las urgencias médicas atendidas en un hospital por un problema de salud relacionado con las drogas se debía al consumo de esta sustancia, que causa sobre todo trastornos psiquiátricos como crisis de ansiedad o de pánico, según el Plan Nacional sobre Drogas. Esta sustancia es, con mucho, la droga ilegal más consumida, y su uso va en aumento, admitió Acebes.
El grupo deberá elaborar un primer informe en seis meses, según el ministro, que no quiso adelantar cuáles podían ser, aunque admitió que una de ellas podría ir en la línea de reforzar las medidas administrativas para impedir la venta de semillas en las llamadas smart shops o de otros objetos relacionados con su cultivo o consumo.
Hachís o marihuana
Acebes recordó el dato de la Encuesta sobre drogas a la población escolar 2002, de acuerdo con la cual uno de cada cinco estudiantes de entre 14 y 18 años es consumidor habitual de cannabis en alguna de sus dos formas, como resina (hachís) o de sus hojas (marihuana). Casi el doble (el 36,9%) lo ha probado.
El ministro destacó que una de las causas de este consumo creciente es la falta de percepción del riesgo. Esta impresión disminuye con la edad. Mientras un 81% de los jóvenes de 14 años piensa que los porros comportan problemas, a los 18 años esta cifra es del 69%. Este porcentaje indica que los jóvenes de esa edad consideran menos peligroso el cannabis que el tabaco, recalcó Acebes.
Otro de los factores de riesgo que señaló el ministro es que la droga que se vende en España tiene cada vez una mayor concentración de THC (tetrahidrocannabinol, la sustancia que da al cannabis sus propiedades estupefacientes). En 1994 oscilaba entre el 4% y el 7%; en 2003 ha llegado en algunos alijos al 20%, indicó el ministro. "Quienes encienden un cigarrillo con cannabis lo hacen cada vez de manera más frecuente, y éste es más potente", indicaron fuentes del Plan Nacional sobre Drogas.
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