Marépolis y copas

La celebración de la Copa del América en Valencia está concitando en torno suyo tal efervescencia de propuestas, algunas de ellas bien pintorescas, que la Asociación de Vecinos y Comerciantes Amics de El Carme no ha podido sustraerse a este sentir general y hemos convocado nuestro particular concurso de ideas para que el centro histórico en general y nuestro barrio en particular esté a la altura de tan magno evento.

Hay que decir que Ciutat Vella ya tuvo su particular Copa del América. Se trata del Plan RIVA, que prometía la regeneración y rehabilitación de Ciutat Vella y cuyos resultados a los diez años de su ¿aplicación? están a la vista de todos: un buen puñado de viviendas nuevas o rehabilitadas junto a otras más numerosas semiabandonadas o en estado ruinoso; calles pavimentadas junto a otras llenas de baches; un paisaje salpicado de solares especialmente en los barrios de El Carmen o Velluters y una deriva hacia la tematización del centro histórico en zona de servicios y de copas... Pero no es esto lo que nos ocupa, sino las propuestas que van surgiendo. Así, por ejemplo, para evitar que los miles de turistas que nos visitarán se lleven una imagen de nuestra ciudad deplorable y tercermundista por culpa de los estos problemas, algunos vecinos proponen que se construya un muro alrededor de ellos que los mantenga ocultos durante todo el tiempo que se celebre la magna competición. Otros, ya se han puesto manos a la obra y han bautizado con grandes pancartas el solar que en su día albergó la oficina de la exposición de la Luz de las Imágenes, enfrente de El Miguelete, como Plaza de la Copa del América, a ver si este nombre convoca la intervención del Ayuntamiento.

Pero de entre todas las propuestas, hay una enviada por un tal Alejandro García que creemos oportuno destacar. Se trata de Marépolis, un proyecto inspirado en la vocación marinera de nuestro barrio. No hay que olvidar que nuestra patrona es la Virgen del Carmen (que lo es igualmente de los marineros). ¿En qué consiste proyecto tan singular? En líneas generales se puede señalar que pretende, principalmente, sacar a flote el barrio.

Siguiendo la estela de la última Bienal de Valencia, que, como recordaremos, se posicionó respecto al estado del centro histórico con el proyecto denominado con todo desparpajo "los solares o el optimismo", este colectivo propone crear espacios fluviales en donde los distinguidos participantes de la regata podrán dar un paseo por las principales calles del centro histórico en pequeñas embarcaciones de vela. Sabemos que en el periodo barroco eran frecuentes eventos de esta índole, se dedicaban ingentes recursos a engalanar y crear fantásticos decorados artificiales. El motivo casi era lo de menos, éste podía ser desde la entrada triunfal de algún mandatario de una potencia extranjera o alguna boda real. ¿No se merecen otro tanto nuestros ilustres futuros visitantes? De este modo el pueblo era partícipe del acontecimiento, olvidando por unos días sus miserias cotidianas. También los vecinos, queremos olvidar los males que afligen al centro histórico durante tan magna celebración.

Los espacios en donde se ubicaría la intervención, podrían ser la Plaça de la Mare de Deu, de donde partirían dos canales, uno que recorrería la calle Cavallers y Quart hasta las torres, y otro que descendería por la Plaza de Manises y la calle de Serranos hasta alcanzar las otras torres. Las puertas de Ciutat Vella serán, de este modo, puertos que acogerían -con nuestra característica hospitalidad- a los ilustres visitantes. Técnicamente, no parece que sea muy complejo. De igual modo que una plaza como la de Manises, se ha transformado en una especie de estanque marmóreo que alberga un bonito jardín florido, esta plaza puede albergar por unos días un espectacular estanque acuático. Como colofón final, en la Plaça dels Furs habría un espectáculo de patines acuáticos dibujando figuras alegóricas al evento de la Copa del América.

Estamos convencidos de que, en caso de realizarse, Marepolis podría ser un acontecimiento estrella, un evento digno de una urbe que está sorprendiendo al mundo con hazañas como la citada Bienal o la misma Ciudad de las Artes y las Ciencias. Con Marépolis podríamos conseguir que Ciutat Vella no se quedara a dos velas de la Copa del América. Quién sabe si, además, nuestros nuestros políticos repararían finalmente en que no puede esperar más un plan integral para su definitiva recuperación tratándose como se trata del verdadero corazón de la ciudad, su mayor concentración de biodiversidad.

Jordi Riera y Toni Cassola pertenecen a la Associació de Veïns i Comerciants del Barri del Carme.