El Museo de Breda exhibe un óleo inédito de Van Gogh

El Museo de Breda ha descubierto un van gogh de la época en la que el pintor holandés estuvo trabajando en La Haya, entre diciembre de 1881 y septiembre de 1883, antes de viajar a Francia en infructuosa búsqueda de fortuna y reconocimiento artísticos. Con los colores oscuros propios de aquella época holandesa, en las antípodas estilísticas del brío y vivacidad que dan a los van goghs una marca universalemente reconocible, Casas cerca de La Haya es un lienzo sobre tabla de pequeño formato descubierto y presentado ahora por el Museo de Breda en una exposición junto a otras obras de misteriosa procedencia entre las que también podría haber algunas más del genio que se suicidó en 1890, a los 37 años.

La muestra Vincent van Gogh: perdido y encontrado se ha montado en torno a unos 40 lienzos y decenas de dibujos, carboncillos, pasteles y estudios vinculados a Van Gogh, que podrían, o no, ser del pintor. Los especialistas del museo han encontrado uno que sin duda fue pintado por quien sólo logró vender un cuadro en vida.

Como en todo lo que fue la atribulada vida del genio, la selección que hasta el 1 de febrero presenta el Museo de Breda está envuelta en una nebulosa de misterio y confuso origen. Van Gogh dejó Holanda a finales de 1885 y recaló en París en febrero de 1886 para no volver nunca más por su país. Detrás dejó cientos de trabajos de distinta factura, técnica y soporte que su madre guardó en unas cajas y arrastró en un par de mudanzas en Breda hasta que decidió desprenderse de lo que consideraba basura. Se lo regaló a un transportista y éste, por un florín, vendió las cajas a un chamarilero, que intentó colocar las obras, a cinco y diez céntimos, por calles y bares y a algunos particulares interesados.

Envueltos en la sospecha

El grueso fue adquirido por un excéntrico coleccionista, de cuya propiedad pasó en 1939 a manos de otro admirador, Adrianus Marijnissen, todo en torno a Breda. La ciudad era por aquella época un centro de fabricación de van goghs y los de la colección Marijnissen se vieron envueltos en la sospecha. Obras sin firma, otras con firma añadida, estudios, bocetos, lienzos, pasteles, dibujos... quizá de Van Gogh y, desde luego, de otras manos forman parte de la colección. El museo ha llegado a la conclusión de que Casas cerca de La Haya, un óleo de 16,5 - 24,5 centímetros firmado Vincent, es obra genuina porque es de idéntico estilo a otras obras suyas pintadas por entonces y porque los rayos X muestran que el óleo cubre un estudio de una mujer de Schveningen tricotando.