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El Festival de Cine de La Habana celebra su 25ª edición con 'Suite Habana' como favorita

Gabriel García Márquez y Miguel Littin asisten a la inauguración del certamen

El Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana celebra este año su 25º cumpleaños con 38 películas de ficción, 33 documentales y 97 guiones inéditos en concurso, en momentos en que todavía colean desencuentros entre la intelectualidad de izquierdas y la revolución cubana, a raíz de los sucesos políticos ocurridos en la isla a principios de año. La ceremonia inaugural, realizada el martes en el teatro Carlos Marx, fue apadrinada por el premio Nobel Gabriel García Márquez, que en 1979 encabezó el jurado del primer certamen, y contó con la presencia de otros fundadores del movimiento del nuevo cine como el argentino Fernando Birri o el chileno Miguel Littin.

La noche comenzó con un breve documental que fue evocación y resumen de los 24 festivales anteriores. Los aplausos arreciaron al aparecer en pantalla el rostro jovencísimo de Tomás Gutiérrez Alea, el inolvidable Titón, fallecido en 1996, y también cuando la cámara dio testimonio de los viajes habaneros de Robert de Niro, Harry Belafonte o Francis Ford Coppola; o cuando Gabo premió a Jack Lemmon, como siempre simpático y humilde, por su trayectoria cinematográfica y su amistad hacia Cuba.

Sin duda, aquellos eran otros tiempos. Hoy, de aquel romanticismo revolucionario no queda mucho, a lo que se añade la escasez de recursos para organizar el certamen y la presencia tímida de cineastas y actores de renombre en La Habana estos días. Pese a ello, nadie discute que el festival cubano sigue siendo un espacio privilegiado para entender y tomar contacto con el cine que se hace en esta región, en demasiadas ocasiones a duras penas.

El primer galardonado con un premio Coral honorífico en este 25º festival fue el músico y compositor cubano Leo Brouwer, cuyo nombre está asociado a importantes filmes realizados en Cuba y en el continente en las últimas décadas. Polémica, en cambio, fue la obra elegida para abrir el certamen, la ópera prima del argentino Alejandro Chomski, Hoy y mañana, un auténtico valium que trata el asunto de la falta de trabajo y la dificultad para sobrevivir en la Argentina de hoy.

En esta 25ª edición, la cinematografía cubana, el año pasado ausente del concurso de largometrajes de ficción, llega con cuatro propuestas: Aunque estés lejos, de Juan Carlos Tabío; Entre ciclones, de Enrique Colina; Roble de olor, de Rigoberto López, y Suite Habana, de Fernando Pérez, todas coproducciones con España. Los filmes de López y Fernando Pérez fueron elegidos recientemente por la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood para incluirlas en el proceso de las nominaciones anuales a los premios Globos de Oro.

Roble de olor cuenta una historia cubana que transcurre en la primera mitad del siglo XIX pero que conserva plena vigencia: la de un amor loco que da origen a una utopía caribeña que finalmente sucumbe. La película está basada en un hecho real y tiene como protagonista a Jorge Perugorría.

Suite Habana viene precedida de excelentes críticas, tanto las realizadas fuera como dentro de Cuba, donde sólo se ha exhibido en un cine de la capital. Algunos han querido ver en ella una crítica demoledora al régimen cubano; otros, la descripción cruda de la realidad a la que se enfrentan cada día los habitantes de esta ciudad, hombres y mujeres humildes, pero dignos, que no se dejan derrotar por la penuria y siguen soñando. En los corrillos del hotel Nacional, sede del evento, se apuesta por que Suite Habana -en concurso en la sección de cine de ficción pese a que linda las fronteras del documental- será una de las grandes vencedoras del festival. También en competencia, en la sección de animación, está el último largometraje de Juan Padrón, Más vampiros en la Habana, una coproducción con España que ha sido muy bien recibida por el público cubano.

Entre las candidatas a llevarse los principales premios Coral están la premiada Kamchatka, del argentino Marcelo Piñeiro; la brasileña Carandirú, de Héctor Babenco; Ojos que no ven, del peruano Francisco Lombarda, y Nicotina, de Alejandro González Iñárritu, de México, país que concursa sólo con este filme.

El festival rendirá homenaje al director Costa Gavras con la exhibición de seis de sus filmes, y se realizarán varias muestras de cine europeo (español, italiano y alemán), pese a la agria disputa que enfrenta a Cuba y la Unión Europea a raíz del encarcelamiento de 75 disidentes en la isla el pasado mes de marzo, que ha repercutido negativamente en los intercambios culturales cubano-europeos.

Alfredo Guevara (de pie), presidente de la Fundación del Nuevo Cine Latinoamericano, pronuncia el discurso inaugural. A la izquierda, García Márquez, y el presidente del Parlamento cubano, Ricardo Alarcón, a la derecha.
Alfredo Guevara (de pie), presidente de la Fundación del Nuevo Cine Latinoamericano, pronuncia el discurso inaugural. A la izquierda, García Márquez, y el presidente del Parlamento cubano, Ricardo Alarcón, a la derecha.EFE
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