Ibarra dice que si el PP hubiese acabado con ETA, el PSOE habría mirado "a otro lado"

El presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, del PSOE, aseguró ayer que cuando los socialistas quisieron "acabar con ETA" les "metieron en la cárcel". No citó a los GAL, pero añadió que "el PP hubiera podido terminar" con la banda con métodos como los del grupo terrorista citado: "Nosotros no hubiéramos metido en la cárcel a nadie, incluso hubiéramos mirado para otro lado". Como consecuencia, agregó, "ETA va a terminar sola, no va a ser vencida, va a terminar sola, y si termina sola tendremos un futuro complicado".

Ibarra se mostró convencido de que ETA se eclipsará para facilitar el avance del plan Ibarretxe, pero alertó de que "la llave que cierra la caja es la misma que la abre cuando interese". Según el dirigente del PSOE, interesará abrir la caja cuando, una vez ganadas unas elecciones por el PNV con amplia mayoría y aprobado en el Parlamento vasco el plan Ibarretxe, el proyecto de nuevo Estatuto llegue al Parlamento español, que lo rechazará con el 80% o 90% de los votos.

"Ahí aparecerá ETA y con mucha más fuerza que cuando se cierra en la caja como consecuencia del plan Ibarretxe", aseguró Ibarra, que realizó estas declaraciones el martes por la noche en Mérida con motivo de la apertura de un foro de conferencias promovido por el grupo Vocento. El presidente de la comunidad autónoma de Extremadura pronunció la primera conferencia, titulada Actualizar la Constitución. Un marco para los próximos 25 años.

Pese al sombrío panorama que trazó, Rodríguez Ibarra insistió en la necesidad de que el Gobierno reanude el diálogo con el PNV para saber dónde está el techo de los nacionalistas vascos y calificó de "insensato" acudir a los abogados del Estado para que impugnen la tramitación del plan Ibarretxe, porque se trata de un asunto político al que se debe dar una respuesta política.

Hablar con Ibarretxe

En su opinión, es una insensatez "que se prohiba a [Juan José] Ibarretxe llevar su plan al Parlamento vasco, que lo pierde, y por eso no lo quiere llevar y lo quiere discutir en la calle". "Y nosotros le facilitemos que lo discuta en la calle".

Sobre la necesidad de diálogo con el PNV, el presidente extremeño declaró que los dos grandes partidos políticos, el PP y el PSOE, deberían hablar con los nacionalistas. Si han hablado con ETA, se preguntó, "¿no se puede hablar con el PNV?".

El objetivo del diálogo sería "saber dónde está su reto y saber cuál es su suelo e intentar ver si desde el Gobierno y partidos nacionales tenemos un techo que nos aproxime" y permita "dar una respuesta a este asunto complicado".

Ibarra añadió que él es partidario de que José María Aznar reciba a Ibarretxe. "Aunque sé", aclaró, "que la foto es complicada". Sin embargo, aseguró que el presidente del Gobierno tendría la lealtad del PSOE y esa foto no sería utilizada para debilitarle. Lo mismo debería hacer el líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, siempre que cuente con la garantía de que el PP no va a hacer una utilización partidista de la entrevista.

El presidente de Extremadura propuso entrar en el "juego" de los nacionalistas y el plan Ibarretxe y permitir al País Vasco ser únicamente un Estado libre, pero no asociado, para que "sientan vértigo los vascos", o bien utilizar la Constitución hasta el final.