Iberia prepara la explotación conjunta de rutas aéreas con British Airways

Iberia y British Airways están dispuestas a dar uno de los pasos más importantes en la consolidación del sector aéreo en Europa. Ambas compañías planean la explotación conjunta de líneas, con el reparto correspondiente de beneficios entre las dos, si Bruselas da su acuerdo definitivo, para lo que tiene de plazo hasta finales de año. La explotación conjunta de las rutas comporta, entre otras cosas, la posible cesión de slots (permisos horarios en los aeropuertos) por ambas, para no impedir la competencia, y el intercambio de parte del personal de las compañías.

Si Bruselas da vía libre el próximo diciembre al acuerdo planteado por Iberia y su socio British Airways para la explotación conjunta de las líneas, y ambas compañías deciden finalmente dar el paso, se habrá abierto una importante puerta a la consolidación del sector en Europa. Mayor incluso, según la compañía española, a la acordada fusión entre Air France y KLM, lastrada por las fuertes restricciones de sus normativas nacionales.

El acuerdo entre Iberia y British se planteó hace ya más de un año. El 19 de julio de 2002, las dos empresas presentaron a la Comisión Europea la propuesta para conseguir la inmunidad antimonopolio. Se abrió entonces un periodo de consultas y el 12 de septiembre pasado Bruselas publicó el marco en el que autorizaría la operación.

Cesiones en los aeropuertos

Según sus condiciones, si algún competidor quisiera entrar en las rutas operadas en conjunto por Iberia y British Airways en Madrid-Barajas y Londres-Gatwick, las compañías tendrían que ceder como máximo cuatro slots (permisos horarios de utilización de aeropuertos) en ambos aeropuertos. Si el competidor quisiera entrar en las rutas de Bilbao, Valencia o Sevilla a Londres-Gatwick, la cesión de slots sería de uno, en función del número de pasajeros que ese competidor transportara con tarifas no restrictivas. Bruselas impone igualmente la congelación en el número de frecuencias entre Londres, Bilbao, Valencia, Sevilla, Barcelona y Madrid hasta la temporada de invierno 2004-2005.

A partir del 12 de septiembre se abrió un periodo de tres meses para permitir alegaciones por parte de otras compañías, de manera que Bruselas decidirá antes de fin de año. Será el pistoletazo de salida para un acuerdo que, según Iberia, además de ahorrar costes, permite defender posiciones ante terceros. Es la antesala a las fusiones, mientras no se reformen las restrictivas normativas nacionales.

La explotación conjunta de líneas supone, entre otras cosas, posible intercambio de personal, sobre todo en los aeropuertos y en las divisiones comerciales, y el reparto de los beneficios que esas líneas produzcan en función de los pasajeros que cada compañía aporte a las mismas.

Si finalmente ambas compañías acuerdan la explotación conjunta de algunas líneas, Iberia sumaría una nueva forma a la explotación del negocio, enfocado en acomodar la oferta y la demanda y en la reducción de costes, estimada entre 350 y 400 millones de euros en 2005, según el plan director en marcha. Sólo con la reducción de costes comerciales, centrada en la reducción de las comisiones a las agencias de viaje por la emisión de billetes -que bajará del 6,5% establecido en 2003 al 1% en 2005-, Iberia ahorrará entre 100 y 110 millones de euros; entre 65 y 75 millones por el aumento de productividad del personal, y entre 40 y 50 millones por el nuevo servicio a bordo, que incluye, además de la mejora de la clase business, el pago por el menú a bordo en la clase turista en vuelos a Europa.

Pasajeros en turista

Dentro del nuevo modelo de servicio a bordo, Iberia prepara también cambios con respecto a los pasajeros que viajan en turista en vuelos nacionales o europeos, pero con tarifa completa. Según la filosofía de la compañía, "no se puede tratar igual" a un viajero que paga más de 300 euros que al que paga 25. Por eso trabaja en un sistema que identifique al pasajero, pueda contactar con él en cualquier momento y le premie con más puntos a cargar en su tarjeta o con algún tipo de boleto para alojamiento o similar.

Pese a que los resultados obtenidos entre enero y septiembre de este año son un 36% inferiores a los registrados en 2002, la dirección de la compañía se ha manifestado "muy satisfecha", por entender que a lo largo del año el negocio ha ido mejorando al compararse con los resultados obtenidos por su competencia más directa. La empresa ha añadido además, que octubre va a ser un mes mejor de lo esperado, con importantes crecimientos en el tráfico a América Latina, que en el caso de algunos países como Argentina o Brasil alcanzan hasta el 40%.