El Observatori laboral examina las salidas de las 60 titulaciones de la Universitat

"Uno puede ser un excelente licenciado en Derecho, pero si no tiene una mínima preparación para gestionar su carrera, puede que nunca ejerza de abogado". Éste ilustrativo ejemplo lo formula el catedrático José María Peiró director del Observatori d'Inserció Professional i Assessorament Laboral (Opal) que la Universitat ha estrenado este curso para dar respuesta a situaciones como la citada. Y para servir de puente al primer empleo la oficina parte de dos líneas de trabajo bien definidas: el análisis del mercado laboral y el asesoramiento al alumno. La oficina está ubicada en la calle Bachiller del campus de Blasco Ibáñez, donde se emplazaba el Servei de Publicacions, y sus dependencias se han transformado para tal fin: un aula multiusos con ordenadores donde los estudiantes pueden recibir valiosas informaciones laborales; varios despachos atendidos por técnicos que resuelven personalmente dudas; salas para los análisis de datos y clases para las sesiones de orientación grupal.

"El análisis de mercado es una herramienta para reconducir carreras si se precisa"

El catedrático de Psicología señala que "la Universitat más sensibilizada con las demandas sociales" creó el Opal para responder a la salida laboral de los estudiantes en un mercado más flexible y diversificado: "Es extraño que una persona dure toda una vida en una sola empresa", dice, y además añade que el titulado debe barajar la gestión de su propia inserción profesional, "porque es importante que los empresarios de un país sean personas con una alta cualificación como los universitarios".

Además el director del Opal añade dos nuevas razones más coyunturales: la convergencia europea "que plantea a la universidad el reto de dotar a los alumnos de conocimientos como hasta ahora, pero también de competencias", y " las exigencias de las demandas de acreditación" que exigen a las universidades herramientas de gestión e información detalladas. De ahí que una de las partes fundamentales del Opal sea el análisis.

En estos momentos se está diseñando un estudio que analizará la situación de los titulados de la Universitat en los últimos cuatro años. La muestra examinará 13 titulaciones a partir de 2.000 encuestas. El objetivo es realizarlas periódicamente y de las 60 titulaciones de la universidad. "Nos interesa saber qué están haciendo, qué tipo de trabajo tienen y si están satisfechos, entre otros parámetros". Unos datos en opinión del catedrático cruciales para que los gestores de la universidad planifiquen y, si es preciso, rediseñen algunas titulaciones para que se avengan a la salidas profesionales.

También se examinará la demanda laboral y las empresas valencianas. La Universitat de València ya ha trabajado este ámbito a través de la Fundación Adeit, que editó la guía de prácticas, un estudio que se puede consultar digitalmente con información de las prácticas universitarias en más de 500 empresas valencianas.

El otro bloque de trabajo del Opal recoge el asesoramiento al alumno. En primer lugar se ha desarrollado un centro de documentación con libros, revistas, portales de empleo, una parte del cual está operativo en Internet. La intención es que la teleconsulta englobe todos los servicios que se prestan ahora físicamente y próximamente habrá una parte que requerirá contraseña para restringir la entrada a los estudiantes de la Universitat. Además como centro de asesoramiento se realizan consultas personalizadas que son atendidas por técnicos, consultas grupales y visitas a las facultades. "Queremos estar cerca del estudiante", sintetiza Peiró que confía en implantar un Opal en cada campus de la Universitat y en ampliar la plantilla a principios de año. Una oficina empleadora que emplea.