Imaz dice que el acuerdo con Batasuna fue "algo puntual"

El portavoz del Gobierno vasco, Josu Jon Imaz rechazó ayer las duras críticas vertidas por el PP y el PSE tras el acuerdo que los tres partidos que apoyan al Ejecutivo suscribieron con el grupo parlamentario de la ilegalizada Batasuna en el debate del Plan 2003-2006 sobre Salud Laboral. Para Imaz se trata de una coincidencia en el voto que los grupos de la oposición han magnificado para tapar el "escándalo de la manipulación que hizo el presidente del PP, Carlos Iturgaiz".

PNV, EA e IU pactaron de manera específica con el diputado de SA, Jon Salaberria, una enmienda en la que los cuatro grupos incluían la reivindicación de un marco autónomo de relaciones laborales, y lo hicieron apenas 48 horas después del atentado contra la vivienda del concejal socialista de Andoain, Estanis Amutxastegi. Salaberria fue condenado a siete años de inhabilitación total y a uno de cárcel por enaltecimiento de actos terroristas. La sentencia está recurrida en el Supremo.

Imaz reiteró que lo del jueves "fue algo puntual" e insistió en que "el Gobierno vasco tiene el compromiso firme y claro de no alcanzar acuerdos con Batasuna en tanto en cuanto no tenga una posición clara y firme en la defensa del derecho humano más básico, que es el derecho a la vida". Además, puso como prueba de este compromiso que no van a recabar el apoyo de Batasuna para sacar adelante los Presupuestos de la comunidad autónoma para 2004 en su próximo debate en el Parlamento vasco. "Si tuviéramos voluntad de quebrar ese principio, hubiéramos tomado como referencia un tema políticamente sustancioso, pero no es el caso", dijo.

El Parlamento distribuyó ayer las imágenes en las que se ve al parlamentario del PP Carlos Iturgaiz, que se sienta en la Cámara junto a Mayor Oreja, pulsar hasta tres veces

el botón del escaño del ex ministro del Interior que indica su presencia en el salón de plenos. Las imágenes demuestran que no se trató de un error o de un descuido de Iturgaiz cuando Mayor Oreja no estaba, sino que fue voluntario. Por eso, los servicios jurídicos de la Cámara estudian si se puede o no sancionar a Carlos Iturgaiz. Aunque con su manipulación no falseó el sentido de ninguna votación, sí pulsó premeditadamente el que anunciaba la presencia de un diputado que estaba ausente.

Serán la Mesa o la Junta de Portavoces las que, en la reunión del próximo martes, decidan si se sanciona el comportamiento de Iturgaiz, aunque su acto no alterara el sentido de las votaciones.