Zapatero afirma que la baja productividad genera pérdidas de 48.000 millones en España

El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, fue contundente ayer al señalar la baja productividad de la economía española como el principal problema para el crecimiento futuro del país. Zapatero añadió que la escasa productividad durante los años que el PP lleva en el Gobierno han hecho perder a España unos ingresos cercanos a 48.000 millones de euros, una cifra equivalente a la mitad del PIB de Irlanda o Portugal. Para solucionar el problema, el PSOE propone, entre otras cosas, simplificar los tipos de contratos e invertir en innovación tecnológica.

La escasa productividad de la economía española es el caballo de Troya con el que Zapatero pretende hacer mella en el tema que más esgrime el Gobierno del PP para defender muchas de sus decisiones. Tanto en el reciente debate de los Presupuestos para 2004 como en su intervención de ayer en la conferencia organizada por The Economist para analizar la competitividad de España, Zapatero centró en este asunto sus críticas a la gestión económica del Gobierno de José María Aznar.

Para el secretario general del PSOE, la baja competitividad ha supuesto un coste de 48.000 millones de euros a la economía, cantidad que hubiera permitido en los siete años de Gobierno del PP un avance adicional del PIB (producto interior bruto) del 9%, según sus cálculos. Zapatero indicó que, con esa cantidad, la renta española equivaldría al 95% de la media de la UE, lo que permitiría lograr la convergencia con los Quince en una década, en lugar de los "20 años" que costará con el modelo del PP.

Oportunidad desperdiciada

Zapatero recordó que en los años de Gobierno socialista la productividad avanzó una media anual del 1,7%, mientras que en los siete años que van con el PP en La Moncloa, la media ha sido del 0,6%. "Se ha desaprovechado una oportunidad histórica" de beneficiarse de la estabilidad del tipo de cambio y los bajos tipos de interés. El PSOE acusó al Gobierno de compararse sólo con lo que crecen otros países de la UE, sin mirar "a lo que podíamos haber llegado" con un avance de la productividad mayor. "En buena parte del tejido productivo, económico y social se extiende la idea de que el patrón de crecimiento del PP está agotado", afirmó. Zapatero atribuyó la baja productividad a la "insuficiente" acumulación de capital físico productivo, de capital humano y al retraso tecnológico. Zapatero criticó que en los últimos tres años la inversión industrial está "estancada" y, ante la pérdida de competitividad que implica el diferencial de inflación con la UE, el PP "hace caso omiso". El "desvío" de recursos al sector inmobiliario, que suponen el 7% del PIB, el "doble" que en el resto de los países desarrollados, "lastra el presente y futuro económico".

"Esta desviación ha dado lugar a la peor forma de economía sumergida. Nunca han ido tan de la mano el billete y el ladrillo", afirmó Zapatero. Y aquí el líder del PSOE dejó caer que pretende "mover ese dinero" cuando gane las elecciones en colaboración con el Banco de España y el Banco Central Europeo, y reformar la Agencia Tributaria para luchar contra la economía sumergida. Ni Zapatero ni el portavoz económico del PSOE, Jordi Sevilla, quisieron ahondar en su plan para combatir el "dinero negro". Sevilla dijo que "ya irá conociendo" ese plan.

Para dar algún tipo de respuesta a la escasa productividad, Zapatero dijo que había que cambiar muchas cosas en el mercado laboral. Habló de la "ineficiencia" del mercado, fruto del alargamiento de la jornada de trabajo, la poca conciliación de la vida familiar y laboral, el número de horas extraordinarias y la alta temporalidad. Zapatero se comprometió a reducir y simplificar los tipos de contrato, potenciar la contratación indefinida a tiempo parcial y reformar "en profundidad" los servicios públicos de empleo (Inem).

En cuanto al retraso tecnológico, Zapatero denunció la "improvisación" del PP en esta materia, con "tres ministros en tres años" y "tres planes en dos legislaturas", y la "fuga de cerebros". "Las empresas deben liderar el esfuerzo tecnológico", sostuvo Zapatero, "pero para ello habrá que mejorar el marco de financiación" pública y privada y, como medida adicional, unificar los ministerios de Ciencia y Tecnología y Educación.