La Semana de la Ciencia
En la comunidad autónoma donde vivo, Madrid, se celebra estos días la III Semana de la Ciencia. Es una iniciativa sumamente interesante gracias a la cual, entre otras cosas, se abren al público los más importantes centros de investigación para que podamos ver sus entrañas. Lo curioso es que, hojeando el programa de este año, he quedado impresionado al leer que una de las actividades propuestas, en este caso por la Universidad Pontificia de Comillas, se titula Vivir cristianamente y con sentido, estupendo eslogan para quien le quiera sacar provecho, pero, lo mire por donde lo mire, no veo qué relación tiene con la ciencia.
A lo mejor es que la Presidencia de la Comunidad de Madrid, además de suspender en Religión a los alumnos poco aplicados en materia espiritual, quiere incluir la Teología entre las disciplinas científicas (¿serían en ese caso Ciencias Exactas, es decir, Infalibles?).
Menos mal que, más adelante y en el mismo elenco de actividades, se puede conocer también la existencia de una conferencia organizada por la Universidad San Pablo CEU titulada Lo que Dios ha separado... Relación entre ciencia y religión. Yo me quedo con este título.